La oposición municipal fue coincidente en la valoración de la desestimación del Erte al reclamar la dimisión del concejal de Movilidad, Giuseppe Grezzi, y la directiva de la EMT. Así, la portavoz del PP tildó la medida ahora rechazada de «un despropósito absoluto de la cúpula directiva» y recordó que su partido ya había advertido que en Valladolid se había «tumbado el ERTE de la empresa de transportes». Català había PP recordó este antecedente al alcalde y le preguntó si existía «un plan B» y si se habían hecho las gestiones previas con la Conselleria, a lo que Ribó indicó: «"Claro". O el señor Ribó nos mintió otra vez o sus compañeros de Compromís en la Generalitat le mintieron a él».

Fernando Giner, portavoz de Ciudadanos, afirmó que «la EMT es una empresa que ha demostrado ir a la deriva y ni el concejal Grezzi está capacitado para tomar decisiones políticas sobre la EMT, ni el gerente de la empresa asume su incapacidad para gestionarla».

El edil de Vox, Vicente Montañez, extendió la responsabilidad al edil de Hacienda, Ramón Vilar, por la gestión del ERTE.