La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de València adoptó ayer la decisión de contratar la ejecución de las obras para la instalación de cámaras de videovigilancia en los entornos de edificios declarados Bien de Interés Cultural (BIC) de la ciudad. En total , se trata de 43 cámaras para siete monumentos, entre los que está la Lonja o las Atarazanas.
El contrato para llevar a cabo esta decisión prevé un presupuesto de 508.298 euros y una duración de tres meses. El consistorio pretende con esta decisión prevenir cualquier acto de vandalismo y proteger el patrimonio. Estas 43 cámaras se colocarán en la Lonja, las Torres de Serranos, las Torres de Quart, las Atarazanas, el Almodín, el Museo de la Ciudad y el Palau de Cervelló, y estarán conectadas directamente con la Central de la Policía Local. Los dispositivos serán capaces de captar video durante la noche.
El vicealcalde Sergi Campillo explicó que «su ubicación será principalmente en farolas existentes y en fachadas del entorno» con el fin de «evitar perforar las paredes de los edificios y monumentos protegidos».
Ayudas para el Cabanyal
La Junta de Gobierno Local también aprobó solicitar a la Conselleria de Vivienda incluir a la sociedad Plan Cabanyal como entidad colaboradora de las subvenciones destinadas a particulares para la rehabilitación de viviendas en el barrio. Una vez hecho este trámite se agilizarán las ayudas del Arru II, dotadas con 8,2 millones de euros.
