La apertura de las terrazas antes que los locales de bares y restaurantes y la confianza que generan los espacios al aire libre frente a los cerrados ha hecho que se disparen las peticiones de licencias para nuevas terrazas en la ciudad de València. Según fuentes municipales, desde que se inició el Estado de Alarma se han recibido 150 peticiones y se han aprobado ya alrededor de 80. Solo la semana pasada se «pintaron» en el suelo 75 nuevas terrazas en la capital, un acelerón que ha sido posible, según las fuentes, a las medidas de flexibilidad que ha introducido el consistorio en la concesión de estos permisos.

En la ciudad de València hay alrededor de 4.000 terrazas, espacios especialmente rentables debido a las buenas condiciones meteorológicas de todo el año. No obstante, hay muchos otros bares y restaurantes que por falta de espacio en la calle o por las características del local no disponen de este servicio.

Pero ahora todo ha cambiado. La crisis del coronavirus, y más exactamente la desescalada del estado de alarma, ha situado a las terrazas como la primera vía de escape para estos establecimientos, que han estado cerrados dos meses. Desde el lunes se pueden abrir solo las terrazas al 50%, mientras que los locales no podrán empezar a llenarse hasta la siguiente fase y con una fuerte limitación de aforo.

Es más, esta crisis ha enseñado a la población que los espacios abiertos son más seguros que los cerrados desde el punto de vista sanitario. Por tanto, las terrazas se han convertido en una solución.

La prueba es que desde que se decretó el Estado de Alarma en València se han solicitado 150 licencias para abrir nuevas terrazas, de las cuales 80 ya han sido concedidas. Solo la semana pasada se pintaron 75 de estos espacios, es decir, se delimitaron las nuevas ocupaciones en la vía pública.

Cambio de normas

Este acelerón en los trámites se ha producido después de las conversaciones mantenidas entre los responsables municipales, la Federación de Asociaciones de Vecinos y la Federación de Hostelería. Una de las medidas adoptadas ha sido bajar sillas y mesas a la calzada ocupando espacio de aparcamiento, pero además se ha tomado la decisión de agilizar las nuevas licencias suprimiendo trámites.

Hasta ahora para obtener una licencia de terraza era necesario un informe técnico y una resolución del equipo de Gobierno que a veces se demoraba en el tiempo por la necesidad de que informaran los diferentes servicios municipales.

Ahora, sin embargo, se ha suprimido este último trámite y para abrir una terraza basta con tener los informes técnicos favorables. Y luego pueden llegar inspecciones que ratifiquen la situación del negocio o finalmente la resolución que apruebe o deniegue ese permiso.

Es más, en el departamento técnico se ha puesto una persona más para agilizar también ese trámite, según dijeron las fuentes.

Este nuevo sistema de concesión de licencias no caducará, además, cuando acabe el estado de alarma, sino que seguirá vigente después. La medida que sí será transitoria y acabará cuando acabe el estado de excepcionalidad que se vive actualmente, es la bajada de terrazas a la calzada.

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