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Tráfico

Decenas de entradas ilegales en Colón y plaza del Ayuntamiento

Muchos conductores aún no han interiorizado los cambios en estos puntos de la ciudad y acceden de manera irregular - La policía apuesta por informar pese a las campañas puntuales de sanción

Decenas de entradas ilegales en Colón y plaza del Ayuntamiento

En València muchos conductores todavía no han interiorizado los cambios de tráfico en la calle Colón y el entorno de la plaza del Ayuntamiento. Algunos por falta de costumbre y otros por falta de atención. La señal de moda es la que tiene un círculo rojo sobre fondo blanco, que prohíbe expresamente la circulación de vehículos excepto en los casos señalados. Pero decenas de conductores de coches y motos hacen caso omiso de las nuevas restricciones en la principal vía comercial y en el acceso a la casa consistorial por la calle de la Paz. El resultado es que en ocasiones (las menos) reciben una multa que puede llegar a 280 euros; en otras se queda en una advertencia (a modo de ultimátum) de los agentes de la Policía Local; pero lo más habitual es encontrarse a vehículos circulando sin autorización por aquellas zonas prohibidas.

A Colón ya no se puede acceder desde la Porta de la Mar, a no ser que conduzcas un autobús de la EMT o un taxi. A pesar de estar perfectamente señalizado, decenas de coches y motos se saltan esta prohibición cada hora. Basta contemplar la escena unos minutos para comprobar que muchos conductores no cumplen. Después de más de tres meses funcionando este cambio vial todavía siguen siendo muchos los que invaden uno de los dos carriles para el transporte público. Es un pequeño tramo de unos 80 metros en el que además te puedes encontrar vehículos en sentido contrario, ya que está habilitado desde la calle Conde Salvatierra hasta la propia Porta de la Mar.

Para acceder a Colón se ha de tomar alguna de las calles del barrio de Pla del Remei que lo permiten, como Conde Salvatierra, Sorní, Isabel La Católica o Pizarro. Solo existe un carril habilitado para el tráfico privado, ya que los otros dos se han reservado para EMT y taxi, con la intención de crear una calle de preeminencia para el transporte público. El resultado es que la circulación de coches ha bajado un 67 por ciento desde que finalizó el estado de alarma, tal y como publicó Levante-EMV.

El tráfico se redujo un 67 por ciento comparado con el mismo periodo del año pasado, justo en el primer tramo de la vía, desde Porta de la Mar a Sorní. En cambio, los siguientes tramos han disminuido en menor intensidad. Por ejemplo, de Isabel la Católica a Lauria la bajada ha sido del 41 por ciento; de Pizarro a Pascual y Genís ha sido del 37,9 %; y de Pascual y Genís a Xàtiva un 23,6 %.

Que se sepa, la Policía Local solo ha realizado una campaña de control de tráfico de vehículos en el acceso a Colón desde Porta de la Mar, que fue del 1 al 7 de mayo pasados con el resultado de 23 multas al día de media durante ese periodo, según informó la concejalía de Protección Ciudadana al concejal de Ciudadanos, Narciso Estellés.

Calle de la Paz: el otro coladero

Situación distinta es la que se da en el acceso a la plaza del Ayuntamiento por la calle de la Paz. Desde que el pasado 4 de mayo que se procedió a peatonalizar el espacio, tan solo pueden acceder al entorno los autobuses de la línea C1 de la EMT, los taxis, los residentes autorizados, los vehículos de reparto autorizados y, solo a la plaza de la Reina, aquellos que quieren acceder al aparcamiento subterráneo. Sin embargo, solo una pequeña señal de prohibición está situada en el encuentro entre las calle de la Paz y Poeta Querol, por lo que es habitual ver cómo se cuelan muchos vehículos.

Si se accede por error a esta zona restringida el usuario aún tiene la opción de salir del atolladero por la calle del Mar, ya que en Sant Vicent se vuelve a recordar a los conductores la prohibición de acceso.

En este punto de la ciudad la Policía Local ha tomado una actitud mucho más informativa, ya que a no ser de cometer una infracción mayor, el error se «castiga» con una advertencia y reprimenda de los agentes por no estar atentos a las señales. Lo cierto es que si accedes a Sant Vicent por error, la salida ha de ser por la calle de las Barcas, un recorrido demasiado céntrico como para salvarse de la presencia de los agentes de la autoridad. Al fin y al cabo, es el nuevo lugar sacrosanto de las peatonalizaciones en València.

Respecto a este entorno, Ciudadanos preguntó a la concejalía de Movilidad si los propietarios de puestos de flores tenían garantizado el acceso a la plaza del Ayuntamiento, y la respuesta es que efectivamente la tienen, de 8 a 10 de la mañana, tanto para sus vehículos particulares como los de reparto. Sin embargo, para el edil Narciso Estellés, este tiempo es «insuficiente».

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