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Ciudadanía

La Ordenanza de Convivencia ya prevé una Taula de Civisme similar al Observatorio del Ocio

El texto de la nueva ordenanza, consensuado, entre otros, con hosteleros y vecinos, también prevé un sistema de mediación reglado legalmente y establece un régimen sancionador

La Ordenanza de Convivencia ya prevé una Taula de Civisme similar al Observatorio del Ocio

La Concejalía de Protección Ciudadana tiene previsto presentar el próximo mes de septiembre a los grupos políticos y sacar a exposición pública la Ordenanza de Convivencia de la ciudad de Valencia, que ya ha sido consensuada con todos los agentes sociales, incluidos vecinos y hosteleros, y que ya contempla la opción de la mediación para resolver conflictos e incluso la creación de una Comisión Municipal para la Convivencia Ciudadana (Taula de Civisme) tuteada por la Policía Local con objetivos similares a los del Observatorio del Ocio que ahora se quiere relanzar desde el equipo de Gobierno municipal. La ordenanza de Convivencia, además, incorpora todo un capítulo sancionador, elemento fundamental de toda norma.

La crisis del coronavirus y la vinculación del ocio nocturno con muchos de los brotes que se han producido ha llevado al alcalde, Joan Ribó, a recuperar la figura del «alcalde de noche» como elemento de mediación y resolución de conflictos. No obstante, en la primera reunión con los hosteleros los objetivos se han centrado en la puesta en marcha del Observatorio del Ocio y el Turismo, cuya creación fue aprobada en pleno a principios del año pasado. Su objetivo sería la información, coordinación y resolución de los conflictos entre los locales de ocio y los vecinos.

Se trata, por tanto, de filosofías y objetivos similares a los que ya se han consensuado con los mismos actores sociales para la elaboración de la Ordenanza de Convivencia, que según fuentes oficiales, será presentada a los grupos políticos a partir del mes de septiembre.

Según recoge esa ordenanza, a cuyo documento base ha tenido acceso este periódico, la mediación es uno de los pilares para la resolución de conflictos, rigiéndose siempre por la legalidad vigente en este sentido y con los actores que legalmente puedan garantizar el acuerdo.

Taula de Civisme

Es más, el documento prevé la creación de una Comisión Municipal para la Convivencia Ciudadana (Taula de Civisme), similar a lo que sería el Observatorio del Ocio, con representantes de todos los actores implicados en el problema del ocio y, eso sí, del esto de cuestiones que intervienen en la convivencia ciudadana en general.

Finalmente, la ordenanza contempla un régimen sancionador para el caso de que no funcionen otras medidas, con multas que llegan hasta los 3.000 euros en el caso de las faltas muy graves; hasta los 1.500 para las graves; y hasta los 750 para las leves.

Las fuentes entienden que para luchar contra el coronavirus, como apuntaba el primer impulso de Joan Ribó para acelerar la figura del alcalde de noche, hacen falta medidas inmediatas que incidan en los comportamientos de las personas. Los datos indican que nueve de cada diez contagios tiene lugar en el ámbito privado, no en el espacio público o el ocio nocturno, por lo que la concienciación debe ser lo más inmediato. Y una cosa diferente sería abordar los problemas del ocio nocturno en toda su dimensión. Ahí es donde entraría en juego la Taula del Civisme o el Observatorio del Ocio que ahora se ha puesto sobre la mesa, fórmulas similares que podría actuar de forma paralela.

Las fuentes entienden que un observatorio tiene una función ligada al análisis, estudio o elaboración de informes y recomendaciones para abordar determinados asuntos, en este caso el ocio. La ordenanza, sin embargo, tiene como misión resolver directamente los problemas, con un sistema de mediación reglado, una mesa de diálogo tutelada por la Policía Local y un régimen sancionador.

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