"¿Qué FP tiene más salidas laborales ahora?". Esta es la pregunta más popular entre los jóvenes valencianos que acuden al Centro Oficial de FP Implika València para pedir información. Y es que, en tiempos de crisis, la principal preocupación sigue siendo la de encontrar un empleo. Para ello, la formación, y en concreto la FP, sigue siendo el camino más rápido para lograr una inserción laboral de calidad.

En el centro de formación tienen todo preparado para comenzar el curso con todas las medidas de protección instauradas para garantizar una formación segura a su nuevo alumnado. Implika València, ubicado en el paseo de Ruzafa, cuenta con amplias instalaciones para respetar la distancia de 1,5 metros entre cada estudiante, tal y como han indicado desde el Ministerio de Educación y Formación Profesional.

«En un contexto sacudido por la crisis, la FP continúa siendo sinónimo de empleo. Y más aún ahora», señala el director general del centro, Zigor Maritxalar. La Formación Profesional tiene un índice de empleabilidad del 85 % y, según los últimos datos, casi el 40 % de las empresas buscan específicamente titulados en FP con una sólida formación práctica que les capacite para empezar a trabajar desde el primer día.

Se disparan las ofertas de empleo del sector tecnológico

Los estudiantes han de tener claras todas las posibilidades laborales que tienen a su alcance y cuáles les abrirán las puertas a un empleo. Desde la Agencia de Colocación de Implika, a través de la cual gestionan miles de ofertas de empleo cada año, ya vaticinan que al sector de la informática le espera un futuro muy prometedor. De hecho, para las empresas que ofrecen soluciones tecnológicas la crisis del coronavirus no ha hecho más que incrementar su actividad.

«Estos perfiles ya contaban con una alta demanda antes de la crisis en ciudades como València. Son profesiones con muy poco paro e, incluso, hay periodos en los que escasean tanto que faltan profesionales cualificados», informa Zigor Maritxalar. «Lo que más nos piden son titulados en Desarrollo de Aplicaciones Web y Multiplataforma», confiesa. Además, el centro cuenta con un programa de especialización para sus titulados del área informática que les permite un acceso directo a un contrato de trabajo tras una formación intensiva de seis semanas.

Y lo mismo ocurre con la demanda de profesionales de soporte técnico informático. «La implantación generalizada del teletrabajo y el aumento del consumo de Internet en los hogares durante la cuarentena ha convertido en esencial la titulación de Técnico Superior en Administrador de Sistemas», apunta Maritxalar. «De hecho, hemos comprobado como la mayoría de las empresas valencianas se han visto obligadas a reforzar a su personal informático para atender a todos los servicios».

Los apasionados de los videojuegos también pueden compartir su pasión en una profesión y capacitarse para trabajar gracias al Título de Técnico Superior en Animaciones 3D, Juegos y Entornos Interactivos. Implika València cuenta además con una triple titulación única en España que otorga también el Máster en Diseño o Programación de Videojuegos y el Certificado en Realidad Virtual, Realidad Aumentada y Gamificación. Una titulación que les permitirá diferenciarse en el mercado y destacar entre el resto de candidatos.

Más sanitarios para controlar la salud de los trabajadores

El sector sanitario siempre ha destacado por su baja tasa de paro y, dada su relevancia durante la pandemia, en el futuro próximo será sin duda una fuente importante de puestos de trabajo. «El sector público reforzará las plantillas y es muy probable que en los próximos meses muchas empresas valencianas incorporen sanitarios para vigilar el estado de salud de sus trabajadores», confirma Zigor Maritxalar, director general de Implika.

Para ello, el centro cuenta con el Ciclo Formativo de Cuidados Auxiliares de Enfermería en el que, tras solo un año, los alumnos ya pueden incorporarse al mercado laboral en clínicas, hospitales, ambulatorios, residencias, servicios de atención domiciliaria, etc. Rápido y con garantías.

En el sector sanitario y asistencial destacan también otras titulaciones de FP con grandes posibilidades de inserción laboral en València, como la de Técnico en Farmacia y Parafarmacia o la de Técnico Superior en Higiene Bucodental.

Menos alumnos, más profesores

Otro sector en el que la covid-19 va a crear nuevas oportunidades laborales es el de la Educación Infantil. La nueva normalidad obligará a reducir el número de alumnos por clase y aumentará, por consiguiente, la necesidad de nuevos Técnicos Superiores en Educación Infantil para trabajar con menores de 0 a 6 años en instituciones públicas y privadas, en programas específicos con niños en situación de riesgo social o en actividades de ocio y tiempo libre.

860.000 puestos libres en Marketing

En el ámbito de la empresa, la FP de Técnico Superior de Marketing y Publicidad es la puerta de entrada para empezar a trabajar en puestos tan solicitados como el de experto en redes sociales, creador de campañas publicitarias, técnico en relaciones públicas, organizador de eventos... Los alumnos y alumnas de este ciclo superior realizan prácticas en grandes empresas como Ikea, Eroski-Caprabo, Foot Locker o Catalana Occidente, entre muchas otras.

En el ámbito de la gestión empresarial, otros estudios de FP con gran salida en València son el Grado Medio en Gestión Administrativa, Técnico Superior en Comercio Internacional, Técnico Superior en Administración y Finanzas o Técnico Superior en Asistencia a la Dirección.

Un innovador método de estudio que reduce el abandono escolar

¿La clave del éxito de Implika? Una metodología de estudio híbrida que combina lo mejor de la formación presencial con las ventajas que aportan las herramientas digitales de aprendizaje. «Tras analizar las particularidades de aquellos que querían formarse, nos dimos cuenta de que una metodología mixta era la opción más pragmática y eficiente para responder a las exigencias de un perfil de alumnado que demandaba una mayor autonomía en su aprendizaje», explica el director.

De esta forma, los alumnos y alumnas aprovechan al máximo el tiempo que pasan en el aula y optimizan su tiempo de estudio. Pero siempre acompañados de un tutor personalizado que supervisa su aprendizaje de manera presencial y evalúa su progreso académico.

¿El resultado? Un índice de fracaso escolar muy bajo y un sentimiento de superación personal generalizado. «Es nuestra máxima garantía para con nuestros alumnos y así es como nos sentimos más útiles para la sociedad. Es un modelo que nos ha convertido en líderes y refuerza nuestra apuesta por la formación como palanca de cambio», remarca Maritxalar.