El colectivo Amics del Carme denunció ayer que en plena crisis del turismo de masas en la época post-covid 19, una conocida empresa de telas ha hecho pública su voluntad de cambiar el uso urbanístico de los edificios de próxima construcción en los solares ubicados frente a la iglesia de los Santos Juanes». «De ser 50 pisos para familias, pasan a convertirse en un macrohotel y 25 apartamentos turísticos», añadían en un comunicado. Este cambio de uso supone «un golpe al tejido social y vecinal de Ciutat Vella que está ya muy desestructurado». De hecho, informes del propio ayuntamiento califican el distrito de «excesivamente terciarizado». El proyecto de la UE4 -nombre que recibe esta actuación urbanística- se ha alargado «casi 15 años con constantes modificaciones que cambiaban poco a poco el urbanismo del entorno monumental hasta desconfigurar y dejar irreconocible el trazado histórico de las calles de los Exarch, de los Valeriola y de la Boatella». El ayuntamiento «ha dejado perder el trazado de las calles del barrio del Mercat que tiene un altísimo valor patrimonial». Además, se pretendía la construcción de un aparcamiento de 2 plantas, que estaba proyectado para dar servicio a las 50 familias que aumentarían la población de Ciutat Vella. En esa línea, Amics del Carme muestra «todo su apoyo al alcalde Joan Ribó cuando dijo que no tiene sentido otro párquing en este distrito».