El Grupo Popular en el Ayuntamiento de València pedirá una nueva comparecencia judicial de los principales dirigentes de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) por la estafa de cuatro millones de euros sufrida hace ahora un año. Según ha explicado su portavoz, María José Català, existen nuevos datos e informaciones, algunos de ellos obtenidos tras su personación en la causa, que exigen una explicación en sede judicial. Según ha podido saber este periódico, hace apenas diez días la entidad bancaria Caixabank, desde la que se hicieron las nueve transferencias a un banco chino, ha enviado un informe al juzgado en el que certifica que la Jefa de Gestión, María Rayón, entró 18 veces en la cuenta de la EMT entre el 3 y el 23 de septiembre del año pasado, periodo durante el cual se hicieron las transferencias fraudulentas por valor de cuatro millones de euros. Esto desmentiría las declaraciones en sede judicial de la propia Rayón, que aseguró que solo lo había hecho en una ocasión, el 17 de septiembre, para «autorizar una remesa de pago a proveedores». Algunas de esas entradas, además, se habrían hecho de madrugada, sin olvidar que por aquellas fechas estaba de baja. El informe de Caixabank, fechado el 4 de septiembre de 2020, es decir, hace diez días, también pone en evidencia la declaración judicial del gerente de la EMT, Josep Enric Alemany, que dijo al juez haber entrado en la cuenta una sola vez, cuando el informe de la entidad bancaria habla de al menos tres veces. Alemany dijo haber entrado también el día de 17 de septiembre y también para «ordenar un pago de remesas». La única investigada por este asunto, la jefa de Administración, Celia Zafra, subordinada de los dos anteriores, entró 26 veces en la cuenta, varias de ellas también en horas intempestivas, según recoge el certificado de Caixabank. Si se cruzan los datos de las entradas en la cuenta de María Rayón y Josep Enric Alemany se comprueba, por último, que seis de las comprobaciones de Rayón coincidieron con días en los que hubo transferencias ilegales y que dos de las efectuadas por Alemany coincidieron también con esas fechas. Ayer precisamente, el PP en el Ayuntamiento de València pidió que los dirigentes de la EMT declaren de nuevo en el juzgado para aclarar las presuntas contradicciones en las que han incurrido.

Según María José Català, no está «nada claro lo que ha pasado en la entidad», al tiempo que censuró el «ejercicio de opacidad» de los «máximos responsables» de la EMT. Igualmente, aseguró que esto lleva a su grupo «a pensar que hay algo que no se nos quiere contar». Respecto al documento remitido al juzgado por Caixabank conocido ayer, fuentes de la EMT han lamentado «las nuevas mentiras del PP» y han asegurado que dicho informe «no es nuevo». «No hay ninguna mentira ni contradicción», han aseverado desde la entidad. Según dicen, Rayón y Alemany «son los únicos que, de manera mancomunada, podían autorizar pagos a proveedores mediante sus credenciales digitales» y «entraron los días 17 y 18 de septiembre para hacer el pago quincenal a proveedores, como contaron en sede judicial». Las mismas fuentes han agregado que «en el caso de la directora de gestión hay conexiones de otros días a unas horas extrañas» que «ella no reconoce», por lo que han dicho que «habrá que aclarar a quién pertenecen esas entradas ya que las pruebas periciales dicen que en los equipos de Empresa Municipal de Transportes de la directora de gestión no hubo ninguna brecha de seguridad».