El Ayuntamiento de València sustituirá un total de 6.600 luces LED defectuosas de Russafa, parte de Ciutat Vella y Massarrojos para mejorar la calidad lumínica en estos barrios y pueblo de València con un presupuesto de 900.000 euros. El vicealcalde, Sergi Campillo, detalló ayer que se trata de luces que se cambiaron en 2013 con una subvención de la Diputación de Valencia, «los famosos LED de Rus», y que «han perdido capacidad de iluminación mucho antes de lo que era previsible». También explicó que el órgano colegiado del gobierno ejecutivo municipal ha acordado esta mañana «declarar la urgencia para la contratación de la reposición de las luces LEDS». Posteriormente, «y de forma inmediata», se llevará a la Junta de Gobierno la licitación de estas 6.600 luces con un coste de cambio de 900.000 euros. El edil destacó que «el ahorro energético no será significativo, pero el objetivo es asegurar la calidad lumínica de esos barrios y pueblo de nuestra ciudad». Campillo expuso que «cualquier persona que haya ido a Ciutat Vella, por ejemplo por la plaza del Negret, se habrá dado cuenta de que la intensidad lumínica, la luz por la noche es escasa. Aparte de que eran luces LED muy blancas y, por lo tanto, no adecuadas, se supone que la vida útil de estas luces era de 50.000 horas, lo que implica 12 años y han sido siete».