La vicealcaldesa y regidora de Desenvolupament Urbà, Sandra Gómez, ha anunciado que han dado comienzo las obras que mejorarán la accesibilidad de la plaza del Santíssim Crist en el barrio de Natzaret. Los trabajos eliminarán unos escalones que provocaban tropiezos entre los vecinos y dificultaban la realización de actos o reuniones en la plaza. Estás actuaciones van en línea de mejorar la «accesibilidad universal del barrio y permitir la creación de ejes verdes peatonales que fomenten la movilidad sostenible», ha declarado Gómez.

Las obras, que surgen de las reivindicaciones vecinales, eliminarán unos pequeños escalones que ocupan diferentes partes de la plaza y que provocan accidentes entre los transeúntes. Además, siendo la plaza un lugar común de reunión vecinal y de celebración de eventos, los peldaños también dificultaban el correcto desarrollo de los actos.

Los trabajos subsanarán este obstáculo, eliminando varias hileras de baldosas, las cuales serán sustituidas por otras baldosas colocadas en pendiente. La nueva inclinación de las losas permitirá que la plaza gane seguridad y accesibilidad, evitando que los vecinos se tropiecen y facilitando el uso dotacional de la misma como espacio para eventos o encuentros vecinales.

Esta acción se suma a otras, como el revestimiento antideslizante de los escalones del túnel de Gran Vía-Germaníes, que pretenden mejorar la accesibilidad y seguridad de aquellos puntos de la ciudad que suponen un problema para los usuarios y en las cuales ya se han invertido 22 millones de euros desde el 2015.

Además, la intervención de la plaza Santíssim Crist entra dentro de la revisión del planeamiento del barrio de Natzaret (Plan Especial del Área Funcional 10) que pretende dar coherencia al barrio desarrollando sus necesidades dotacionales y de accesibilidad en vías de fomentar la movilidad sostenible mediante nuevas zonas verdes y ejes peatonales como el eje Norte-Sur que enlazará peatonalmente la plaza del Mercado con el centro escolar JM Montoya, las conexiones peatonales entre las calles Estivella, Bernabé García y Francisco Falcons o la creación de un espacio verde que conecte con la huerta.

Las obras tendrán una duración de cuatro semanas y un coste de 87.000 euros.

En estos momentos, el barrio de Natzaret es uno de los más beneficiados, junto con el Cabanyal, de los proyectos urbanísticos de la ciudad. A los diseñados por el ayuntamiento se une también la ciudad deportiva del Levante UD, que dará una nueva dimensión a toda la zona.