Vecinos de la calle Juan Fabregat, en el barrio de La Raiosa, han denunciado el aumento de los malos olores, acumulación de enseres y presencia de ratas, a consecuencia de lo que consideran una mala decisión del ayuntamiento, cuando ordenó agrupar en un solo punto, al principio de la calle, los contenedores de reciclaje más los de orgánicos. «Mientras que antes habían tres contenedores distribuidos a lo largo de la calle, y separados de los de reciclaje, que estaban juntos en otro punto de la calle, ahora los han colocados todos juntos además de reducir el número, por lo que siempre están llenos y la basura se acumula y se desborda» señalan. El cambio se produjo, por otra parte, por la queja de una comunidad de vecinos tras ver la intención del consistorio de colocar los contenedores delante de la puerta del patio, «algo intolerable teniendo en cuenta que las plantas bajas son residencias con ventanas que dan a la calle». Ahora, el particular ecoparque es una fuente de incomodidades.