Los vecinos de Camí Real ha exteriorizado su malestar por los malos olores procedentes del alcantarillado y la estación de bombeo y como consecuencia de ello la organización de extrema derecha Vox ha recogido 500 firmas y prepara una moción para el próximo pleno.

Los vecinos de Camí Real llevan muchos años aguantando gravísimos problemas de olores nauseabundos del sistema alcantarillas y de la estación de bombeo ubicada en la calle Manuel Marco Colomer, colindante con un parque de juegos infantiles, y en un suelo en el que el PGOU indica que está prohibida la instalación de infraestructuras. Ante esta situación, residentes del barrio han formalizado su queja con 500 firmas, un 20% de los vecinos en edad de votar, y han mostrado su malestar con el Ayuntamiento: «El olor no se puede aguantar. Por la noche nos entra el olor por la ventana y no debe ser nada bueno respirar esos gases mientras dormimos. Algunas noches de verano hemos tenido que salir de casa y alejarnos unas cuantas calles porque el aire era irrespirable y teníamos miedo» señalaban.

Vox ha pedido en su moción que el alcalde tome nota del grave problema que sufren desde hace años. «Queremos que el Ayuntamiento de València adopte todas las medidas necesarias para solucionar urgentemente el problema. Los vecinos de Camí Real pagan impuestos igual» aseguraba el portavoz, José Gosálbez.