Los vecinos del Saler están «muy preocupados» por el informe que la Concejalía de la Devesa y Ecología Urbana presentó el pasado 16 de septiembre al Ministerio de Transición Ecológica en el que plantea la posibilidad de desplazar hacia el interior el cordón dunar, destrozado en enero por el último temporal, para ganar más metros de playa. «Es un paso atrás», destacó la presidenta de la Asociación de Vecinos de la Devesa del Saler, Ana Gradolí, que así se lo ha trasladado al vicealcalde, Sergi Campillo.

El informe que el ayuntamiento puso sobre la mesa de la ministra de Transición, Teresa Ribera, como informó este diario, advierte de que la eliminación del paseo marítimo, su sustitución por un cordón dunar y los aportes de arena que a lo largo de 40 años se han venido haciendo en las playas del sur de València para frenar la fuerte erosión inducida, sobre todo por el puerto, aunque han rebajado el impacto, «no han conseguido resolver el problema» y la onda erosiva se extiende hacia el sur. Gradolí abunda en esta cuestión y asegura que los aportes de arena y las dunas artificiales «no funcionan y la situación es cada vez más grave». «Hace unos años la playa no se veía desde nuestras casas y, ahora la tenemos ahí». «El mar se ha llevado muchísima cantidad de arena, se lo traga todo, las dunas y lo que pongan», destaca la portavoz vecinal ,que reclama que se consulte a expertos y técnicos y se estudien medidas definitivas como están haciendo algunas ciudades con la colocación de arrecifes».

El alcalde, Joan Ribó, reclamó en septiembre a Ribera los 28 millones de euros anunciados para regenerar con aportes de 2,9 millones de metros cúbicos las playas del Parque Natural de l’Albufera, a las que de momento solo se han hecho aportes puntuales como el iniciado hace dos semanas de 34.000 metros cúbicos de arena procedente de la playa del Cabanyal a la Garrofera.

Además de los aportes, el ayuntamiento propone medidas concretas por tramo para frenar la erosión, como desplazar hacia el interior el cordón dunar , excesivamente elevado en muchos puntos, para generar playas de al menos 50 metros de anchura y estabilizar el litoral, sobre todo en puntos como l´Arbre del Gos, donde el temporal Gloria dejó apenas 14 metros de playa.