Compromís y PSPV han vuelto a chocar esta mañana en la Junta de Gobierno por el modo y los tiempos en que se tienen que gastar los 32 millones de remanentes que tiene el Ayuntamiento de València sin gastar desde 2019.

El alcalde Joan Ribó ha sacado adelante una propuesta con los únicos votos de su partido, Compromís, para destinar ese dinero a pagar deuda comprometida con el BBVA.

Por su parte, los concejales del PSPV liderados por la vice alcaldesa Sandra Gómez votaron en contra porque entienden que "es cuestión de pocos días" que ese dinero se pueda destinar a gastos contra la pandemia.

En una nota de prensa los socialistas explican que el Congreso acaba de liberar esos fondos para destinarlos a inversiones por la covid y no a deuda como marca la ley Montoro.

Por su parte, Compromís argumenta que el Gobierno de España que lidera el socialista Pedro Sánchez "tarda mucho en dar una solución al uso de los remanentes", como ha pedido el alcalde, y mientras han decidido dedicar ya ese dinero a amortizar deuda para tener mayor capacidad de endeudamiento en el futuro.

El PSPV añade en su nota que había un acuerdo de gobierno en este asunto que se ha roto. Compromís recuerda que en julio se adoptó ya un acuerdo de pleno para destinar el dinero para pagar deuda.