La Policía Local de València ha denunciado a dos personas como responsables de un macropuesto de venta de comida en el Jardín del Turia, coincidiendo con la jornada de fiesta de Todos los Antos, que el domingo sacó a muchas personas al parque del antiguo cauce.
La magnitud de la operación es sorprendente, puesto que se han decomisado nada menos que 300 kilos de alimentos, elaborados o no, que se almacenaban sin ningún tipo de control sanitario y en condiciones higiénicas más que cuestionables. La comida iba indistintamente en ollas, botes de plástico y bolsas, guardadas tanto en carritos de compra como en carros de supermercados, así como todo tipo de prendas y mantas.
