El nuevo centro de producción de artes escénicas que el Ayuntamiento va a habilitar en dos antiguas naves industriales del barrio del Cabanyal-Canyamelar llevará por nombre «Bombalino», nombre artístico de Gabriel Fariza, fundador del Teatro de Títeres La Estrella junto con su mujer, la también actriz Maite Miralles. La vicealcaldesa, Sandra Gómez, y la concejala de Acción Cultural, Maite Ibáñez, se han reunido con la familia para comunicarles la noticia

El popular actor y empresario teatral Gabriel Fariza, integrante del dúo de payasos Bombalino y Cuchufleta, y formado en el teatro independiente valenciano, murió hace poco más de un año. En compañía de su mujer, la actriz Maite Miralles, creó la compañía La Estrella, unión que dio lugar a una estética propia, un lenguaje teatral nuevo dirigido al público infantil, con un alto valor estético y una dramaturgia preocupada con el valor pedagógico del teatro para la infancia. Los integrantes de la compañía La Estrella colaboraron, además, como guionistas y actores en programas de televisión como Barrio Sésamo o La cometa blanca.

La vicealcaldesa y concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, ha destacado que Gabriel Fariza «merece este homenaje no solo por su trayectoria artística dedicada al teatro para la infancia, sino también por una trayectoria de compromiso social con el Cabanyal, puesto que fue un referente en la lucha vecinal por la conservación de barrio en la época del movimiento Salvem el Cabanyal». «Gaby fue un luchador y un defensor del barrio, una persona muy estimada y reconocida dentro del mundo cultural de la ciudad».

Por su parte, Maite Ibáñez, explicó que desde la concejalía de Acción Cultural «nos parecía importante identificar este espacio con un nombre que sería referente de las artes escénicas y también del barrio del Cabanyal-Canyamelar. Por eso, hemos pensado que era el mejor nombre que podía tener este espacio». Además, la concejala ha recordado que la histórica sala La Estrella ha cumplido este año el 25 aniversario. «25 años haciendo reír, cantar, imaginar y soñar a los niños y niñas», en palabras de Ibáñez.