La Nochevieja de este año será muy especial en València. Muy distinta a la del año pasado. Tan distinta que, directamente, no habrá. El toque de queda obliga y la Plaza del Ayuntamiento, que el año pasado reunió a 50.000 personas para tomar las uvas, estará cerrada a cal y canto por si alguien tiene la tentación de acudir a media noche a cumplir con el ritual de las uvas. De ello se encargará la Policía Local, que tiene previsto desplegar a 250 agentes por toda la ciudad en la tarde noche de hoy.

Según fuentes policiales, hoy será un día de vigilancia extrema en el cumplimiento de las normas covid y València será el epicentro de ese rigor policial, con especial vigilancia sobre los locales, las fiestas organizadas, los nudos de transporte, los puntos de aglomeración de compras, etc.

Ya semanas atrás, con el repunte de los casos, se barajó la posibilidad de cerrar al tráfico la calle Colón y hacerla peatonal para facilitar el distanciamiento social de los viandantes, pero esa opción se descartó finalmente por el elevado número de líneas de autobús que pasan por esta calle tras la última remodelación de la EMT, líneas que no pueden ser desviadas fácilmente.

Ahora pues, con las cifras de contagio disparadas y batiendo récord tras récord en muertes, la vigilancia se extrema y, desde luego, nadie quiere oír hablar de Nochevieja, al menos en el espacio público. De ahí que se decidiera cerrar completamente la plaza para que nadie tenga la tentación de acudir a la misma para tomar las uvas.

El año pasado, por ejemplo, se concentraron ante el reloj del ayuntamiento más de 50.000 personas, llamadas también por la fiesta de Nochevieja que desde hace unos años organiza la Concejalía de Fiestas.

Ayer por la mañana ya estaban todas las vallas distribuidas por los accesos a la plaza para su colocación en la tarde de hoy. Y un fuerte dispositivo policial velará por el cumplimiento de la norma. Concretamente, la Policía Local, independientemente de la aportación del resto de cuerpos y fuerzas de seguridad, que será amplia, desplegará a 250 agentes por toda la ciudad, vigilando también, aunque no cerrando, otros barrios donde hay sentimiento de pueblo y de centralidad, como pueden ser Benimaclet, Campanar o Patraix. Precisamente Patraix es uno de los que se han atrevido a organizar una fiesta, aunque desde los balcones y con toda la seguridad.

Minuto de silencio en Patraix

La Asociación de Vecinos de Patraix, que todos los años organiza su propia Nochevieja en el barrio, ha mantenido su costumbre también en esa ocasión, aunque muy modificada. Los actos que se celebren en la plaza se podrán seguir a través del facebook de la asociación a partir de las 23.30 horas y un minuto antes de las 12 de la noche se ha invitado a todos los ciudadanos a salir a los balcones y guardar un minuto de silencio por los que ya no están. Además, podrán oir las campanadas de la iglesia del Sagrado Corazón mientras se toman las uvas.