El jardín de la calle del Hospital de València, situado entre la biblioteca y el Muvim, se ha convertido en un gran foco de problemas de múltiple naturaleza, desde vandalismo en el jardín o sobre los restos arqueológicos que alberga, pasando por molestias ocasionadas por patinadores, perros sueltos, discusiones de personas sin techo y hasta reyertas y robos. Así lo reconoce el Ayuntamiento de València en una respuesta al Síndic de Greuges, en la que detallan que en los dos últimos años se han realizado 92 intervenciones por parte de la Policía Local y hasta 130 servicios de vigilancia estática.

Es uno de los jardines más importantes de Ciutat Vella y probablemente el que más problemas genera al Ayuntamiento de València. Desde el estado de la jardinería (con varias zonas donde ya no crece el césped), pasando por la complicada conservación de unos restos arqueológicos a la intemperie o la irresponsabilidad de algunos dueños de perros que pasean sin atar.

En los últimos años se ha sumado, además, que esta zona verde se ha convertido en refugio para personas sin techo, que diariamente duermen en los bancos o entre las plantas, dejando colchones abandonados, cartones y demás enseres. También se dan algunos problemas de inseguridad, por robos o ajustes de cuentas, la mayoría cuando se hace de noche. La particularidad de este parque, que al contrario que lo de nueva creación no está vallado, favorece este tipo de conductas.

Una queja al Síndic de Greuges de un vecino de la zona por un problema ocasionado por una persona sin techo ha dejado a luz la multitud de problemas con los que se enfrenta diariamente el Ayuntamiento de València para mantener la salubridad y la seguridad en este jardín. En una respuesta facilitada al defensor del pueblo valenciano del pasado 2 de octubre, el Servicio de Jardinería reconocía muchas de las dificultades. «Son varias las quejas recibidas sobre la presencia de personas sin techo que permanecen en el jardín del Antiguo Hospital Provincial, y sus problemas asociados (inseguridad, insalubridad, etc.). En este sentido, se adjunta, a modo de ejemplo, el informe técnico del expediente del 19 de agosto, emitido sobre el particular por este Servicio de Jardinería Sostenible y remitido a Policía Local. Conviene explicitar que la Policía Local ha intervenido desde entonces en varias ocasiones, procediendo a su desalojo, así como también el servicio de limpieza ha retirado colchones y diversos enseres», explica en un primer término el funcionario municipal.

Según explican, el Servicio de Jardinería procede diariamente a la limpieza del jardín, así como a la «higienización y desinfección de determinadas zonas (alrededores de las fachadas de la Biblioteca, zona de los restos arqueológicos, traza de la antigua Iglesia, alrededores de la ermita, etc.) por la presencia abundante de excrementos y deyecciones», reconocen.

«En lo que respecta a la jardinería, la misma se mantiene regular y periódicamente y salvo actos puntuales de gamberrismo con rotura de elementos de riego y mobiliario, que son reparados inmediatamente, el aspecto estético y funcional de las unidades ajardinadas puede considerarse correcto y aceptable dentro de los condicionantes de cualquier zona verde urbana sometida a una fuerte presión de uso», manifiesta el servicio municipal.

Dos intensos años

Pero quienes más tienen que decir son los policías locales, que casi a diario intervienen por algún motivo en el jardín. Su relato es particularmente sorprendente. «Durante los años 2019 y 2020 constan realizados 130 servicios planificados de vigilancia estática en el lugar. Además casi diariamente y según las necesidades, también se establece un servicio de acompañamiento a los trabajadores encargados de la retirada de enseres abandonados y demás residuos sólidos», explican sobre su cometido.

En este período de tiempo, en el jardín de la calle del Hospital «constan realizadas 92 intervenciones de diferente tipo, entre las que destacan 19 con perros sueltos, 18 por molestias con monopatín, 5 por consumo de alcohol en la vía pública, 7 asentamientos, 13 por molestias de indigentes, 2 por daños a mobiliario urbano, 3 por consumo de drogas, 6 por agresiones y reyertas, 3 por robo y 2 por hurto», relata la Policía Local en su escrito.

Por último, el servicio asegura que se han dado instrucciones «para que en todos los turnos de trabajo se efectúen vigilancias en la medida que el servicio lo permita».

Tras la respuesta del Ayuntamiento de València, el Síndic de Greuges «no puede sino valorar positivamente» la actuación realizada por la administración, pero no obstante insta «a que se persevere en el intento de solución de este grave problema, en la medida en la que continúe detectándose su incidencia en la zona de referencia o en cualquier otra de la ciudad».

Un ciudadano presenta varias quejas al consistorio

La queja al Síndic de un ciudadano vino motivada porque esta persona tomó fotos del estado del parque como prueba en sus escritos al ayuntamiento. El problema es que, según relata, varias personas sin techo comenzaron a increparlo y se vio incluso obligado a llamar a la Policía Nacional. El vecino asegura que ha denunciado en varias ocasiones «el comportamiento incívico y agresivo de los sin techo y el estado insalubre del jardín».