El alcalde Joan Ribó, el concejal de Transición Ecológica Alejandro Ramón y el concejal de Hacienda Borja Sanjuán acaban de anunciar en rueda de prensa un ambicioso plan que busca que entre un tercio y la mitad de los edificios de València tengan instaladas placas fotovoltaicas en 2031. Para ello, el Ayuntamiento de València ha reducido hasta un 50% el IBI y hasta el 95% el ICIO de la instalación como medidas fiscales para favorecer este tipo de inversiones en energías renovables. Estas bonificaciones fueron detalladas por los tres munícipes valencianos y se enmarcan en la estrategia global del gobierno municipal formado por Compromís y PSOE para reducir las emisiones de CO2, favorecer el autoconsumo eléctrico de la población, implementar las energías renovables y lograr que el consumo de la ciudad provenga en al menos un 25% de energías limpias en 2030.

El alcalde Joan Ribó explicó que los potenciales beneficiarios de esta rebaja fiscal del 50% del IBI son los titulares de casi el 90% de las viviendas de València, cuyo valor catastral es bajo o medio, entre 45.000 euros hasta 75.000 euros. Además, respecto al resto de capitales españolas como Madrid, Barcelona, Málaga o Zaragoza, los incentivos que ofrece la capital valenciana la conviertren en la mejor y más atractiva de España para apostar por estas placas fotovoltaicas.

De hecho, Borja Sanjuán especificó que en València se ofrece una bonificación del 50% en el IBI durante 10 años y hasta el 95% en el ICIO que se paga en la instalación de las placas, que requiere su licencia de obras también. El máximo de esta bonificación en el IBI está fijado en un máximo del coste equivalente al 20% de la instalación fotovoltaica y además es acumulable con otras ayudas de instituciones autonómicas o estatales. A 10 años vista, estos incentivos suponen que las arcas municipales destinarán 5,5 millones de euros, que dejarán de ingresar por estas bonificaciones, a estas políticas favorecedoras de las renovables. Además, se aplicarán en este mismo ejercicio de 2021 a quienes lo soliciten.

Por último, Alejandro Ramón recordó que apostar por la energía fotovoltaica es una forma de generar empleo estable y de fomentar la Economía Verde, además de que contribuye a luchar contra la cabornización de la ciudad, sirve para empoderar al ciudadano en la lucha contra el Cambio Climático y ayuda a los hogares valencianos a ahorrar en la factura eléctrica.