Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La ruina amenaza los palacios de Exarchs tras cuatro años en espera de la licencia del hotel

El proyecto, que incluye un apartahotel, dinamizará el entorno de los Santos Juanes y la Lonja, aseguran los arquitectos, que niegan que el PAI rompa la trama

7

Palacios de Exarchs, en València: la ruina pone en riesgo el patrimonio

El conjunto histórico de los palacios de Exarchs amenaza ruina mientras el dueño de los edificios, protegidos como Bien de Relevancia Local, espera «desde hace cuatro años» la licencia del Servicio de Actividades del Ayuntamiento de València para transformarlos en un hotel de cinco estrellas con 80 habitaciones. «Todos los trámites están hechos, queremos rehabilitar los palacios, que han tenido que apuntalarse y se nos están cayendo, pero la licencia no llega», lamentaba ayer el arquitecto Luis Cortés, autor junto con Alfonso Baños, del proyecto de rehabilitación de los palacios. Un proyecto que está vinculado a un apartahotel con 25 habitaciones de lujo previsto en los solares ubicados frente a los palacios de la calle Exarchs, que forman parte del PAI de la UE 4 de Velluters, y que se ha topado con la resistencia de los vecinos y Amics del Carme, que rechazan más usos hoteleros en Ciutat Vella.

Cocina decorada con azulejos del siglo XVIII de los palacios de Exarchs Levante-EMV

La empresa promotora del hotel, Lova Tres SL, perteneciente al empresario valenciano Julián López, cree que su proyecto lejos de terciarizar más Ciutat Vella contribuirá, junto con el proyecto de rehabilitación de los Santos Juanes y la reurbanización de las plazas de Brujas y el Mercat que arrancarán en breve, a dinamizar este degradado (y monumental) entorno de Velluters. Las obras generarán más de 80 puestos de trabajo y los hoteles, con parking propio de dos plantas, otros 70.

Los promotores, cuyo proyecto entra en los supuestos del plan especial de Ciutat Vella, que permite usos hoteleros en edificios históricos con difícil salida en el mercado residencial, mantienen su apuesta por este uso pese a los vecinos y a la crisis del turismo provocada por la pandemia. «Es un empeño personal» del dueño de los palacios, muy vinculado al barrio. Pese al mantenimiento periódico, tras más de dos décadas cerrados, los palacios están muy deteriorados, los forjados han cedido y los muros presenta grietas, en parte debidas a las obras del aparcamiento del Mercat.

«No hay bloqueo»

La concejala de Actividades, Lucía Beamud, negó ayer que el proyecto esté bloqueado. «El expediente está tramitándose» y lo desbloqueó el actual gobierno tras 25 años parado, afirma la concejala, quien añade que el ayuntamiento «tiene que cerciorarse de que se respetará el entorno y la historia del edificio», donde se conserva una cocina barroca única.

Cortés asegura que el estudio histórico de los palacios ha permitido situar su construcción en el siglo XVI y no en el siglo XIV como se pensaba hasta ahora. Tanto la cocina de azulejos pintados del siglo XVIII, como los pavimentos de Nolla y Dasí y la capilla de San Ignacio del XVII se conservarán. El arquitecto niega además que el proyecto rompa, como afirman los vecinos, la trama medieval del barrio, al incluir dos plazas porque «lo que había antes eran edificios contemporáneos».

Compartir el artículo

stats