El interés de los inversores hoteleros por el frente marítimo de València ha quedado en evidencia durante la segunda fase de exposición pública del plan especial del Cabanyal, donde se ha solicitado compatibilidad de uso hotelero para una veintena de inmuebles de la primera línea de playa, pero también del interior del barrio.

Entre el centenar de alegaciones recibidas al plan, redactado por los urbanistas Luis Casado y Gerardo Roger, destacan las de SMC Cabanyal Real Estate (Juan Miguel López Rueda) y Pitman Inversiones Inmobiliares S. L.( Manuel Broseta) que piden uso hotelero y aumento de altura para varias naves y talleres en desuso y viviendas bajas situadas entre las calles Pavía (actual José Ballester Gozalvo) y Eugenia Viñes.

Entre las edificaciones para las que se ha demandado, sin éxito porque el ayuntamiento ha rechazado dicho uso, se encuentran los edificios situados en los números 104, 116 y 62 de Eugenia Viñes, pero también varias casas bajas aisladas del interior del barrio, ubicadas en San Pedro, Reina, Rosario, Mariano Benlliure y Luis Despuig, donde podrían construirse apartamentos turísticos, limitados a un 10% por manzana según fija el nuevo plan. El ayuntamiento rechaza los usos demandados encaminados, asegura, a promover hoteles horizontales.