El concejal de Movilidad Sostenible y presidente de la Empresa Municipal de Transportes (EMT), Giuseppe Grezzi, junto a la gerente de la compañía de autobuses, Marta Serrano, dieron ayer a conocer las nuevas líneas estratégicas de la mercantil que incluyen poner en marcha nuevos modelos de negocio además de continuar con «la renovación y la descarbonización» de la flota de autobuses, tal como apuntó el concejal. Tanto Grezzi como Serrano reclamaron más recursos económicos al Gobierno tras reconocer una caída del 50% en el número de pasajeros de la compañía por los efectos de la pandemia.

El regidor anunció también que Movilidad Sostenible ha presentado un dossier de proyectos valorados en 280 millones para optar a la financiación europea que distribuirá el Gobierno de España, en el marco de los fondos Next Generation para la recuperación de la economía tras la Covid-19.

En este portafolio, comentó el munícipe, destaca la puesta en marcha de una serie de carriles BUS-VAO, que conectarían también con la red metropolitana. Este plan para crear 4 carriles destinados en exclusiva a autobuses -de la EMT o del área metropolitana- y vehículos de alta ocupación -con 3 pasajeros o más – costaría en torno a 96 millones de euros.

Grezzi comentó que el Ayuntamiento plantea cuatro carriles BUS-VAO en las avenidas de acceso a la ciudad más congestionadas, en concreto en la avenida de Cataluña, avenida del Cid-A-3, la pista de Silla y la pista de Ademuz. El concejal recordó que cada día entran en València «de 70.000 a 120.000 coches diarios por esas vías». Por todo ello, este proyecto tiene una vocación metropolitana «pero necesitamos inversiones del Estado porque solo los carriles VAO» suponen un gasto millonario. El Plan Estratégico de la EMT también prevé la creación de un aparcamiento disuasorio en el Palau de Congressos con autobús lanzadora hacia el interior de la ciudad, la sensorización de los vehículos y la digitalización de la infraestructura de pago. Por su parte, el concejal de Ciudadanos Narciso Estellés lamentó que este plan estratégico de la EMT «no mejora el servicio que reciben los viajeros y olvida totalmente la viabilidad económica de una empresa que cuesta muchos millones de euros cada año a los valencianos». «En Ciudadanos -advirtió- no sabemos el plan de supervivencia que tiene la EMT cuando se acabe el dinero del préstamo de los 27 millones, y el dinero se está acabando». Estellés lamentó no haya «un plan de viabilidad económica».