El vicealcalde Sergi Campillo y máximo responsable de parques y jardines del Ayuntamiento de València anunció ayer que se va a llevar a cabo «una revisión profunda» sobre la reforma efectuada en el parque Gulliver, que tras su reapertura el lunes, tuvo que ser cerrado de urgencia, tras sufrir un grupo de escolares «rasguños y picores» al deslizarse por sus toboganes e instalaciones.

Campillo pidió disculpas a las familias de los pequeños y ha comunicado a la dirección del centro que quiere reunirse con ellas cuando sea posible, para informarlas con todo detalle sobre lo ocurrido.

El vicealcalde avanzó también que se va a encargar «un informe externo» para determinar las causas concretas que han motivado estas erupciones a los pequeños. El concejal explicó cómo fue su actuación tras detectarse el problema y afirmó que ha hablado con el centro para ver cómo van los pequeños. «Hoy -por ayer- he hablado con la escuela y parece que todas las niñas y niños han evolucionado bien. Continuaremos en contacto. Lo más importante es su salud», comentó.

Respecto a cómo se descubrió el incidente y cómo actuó él mismo, Campillo relató: «Durante el último año -el parque Gulliver- había sido cerrado por la pandemia y habíamos aprovechado para hacer mejoras. Evidentemente, antes de tomar la decisión de abrirlo pedí un informe técnico que aseguraba que la instalación estaba en condiciones óptimas».

«En el Parque Gulliver -continúa el vicealcalde- hay un servicio de enfermería permanente. A mediodía, este servicio me avisó que habían ido niñas y niños de una escuela y algunos sufrían picores y tenían un tipo de erupción. Inmediatamente fui hasta allí». «Hablé con las personas responsables -resaltó-, de las niñas y niños, les di mi teléfono para que me mantuvieran informado y cerré el Parque, para que se haga una revisión en profundidad. Además de esto pediré un informe externo para averiguar y analizar qué ha pasado», anunció. «Como ya comentamos antes de la apertura, la instalación está a la espera de una reforma integral, la obra está en fase de licitación y decidimos abrir para que, durante unos meses, todas y todos, pudiéramos disfrutar de este parque tan emblemático. Con la garantía técnica que todo estaba en condiciones», explicó.

Mientras todo se aclara y «por un criterio de prudencia», el parque seguirá cerrado hasta que esa empresa externa contratada determine que las instalaciones son seguras.

Actuaciones en 40 jardines

Por otro lado, Campillo remarcó que el Ayuntamiento trabaja en los procedimientos para la construcción y remodelación de más de 40 jardines de la ciudad durante este 2021, unas zonas verdes a las cuales destinará 4,7 millones de euros. En algunos casos, como el parque de la plaza de Manuel Granero, en Russafa, o el de la plaza Calabuig, en el Cabanyal-Canyamelar, están ya en obras. Por ejemplo, puso en valor que el jardín de Juan XXIII, en el distrito de Benicalap, «es una reivindicación histórica del vecindario».