El alcalde de València, Joan Ribó, se mostró ayer dispuesto a revisar su planteamiento para la instalación de un monolito en la plaza del Ayuntamiento dedicado al 15-M con motivo del décimo aniversario del movimiento. La propuesta del alcalde, como informó este diario, ha causado un nuevo desencuentro con sus socios de coalición, en concreto, con la vicealcaldesa, la socialista Sandra Gómez, que pocas horas después de la propuesta del alcalde, de Compromís, aseguró que no daría apoyo a un homenaje a un solo movimiento ciudadano, argumentando que el activismo social no nació en 2011 y que no se pueden superponer unos movimientos a otros. Gómez pidió a Ribó altura de miras y un homenaje en todo caso más inclusivo, que integre «a todos» los movimientos ciudadanos.

En respuesta a las declaraciones de la portavoz socialista, el alcalde se mostró ayer conciliador y tras la visita a la Alquería Julià, nueva sede de la Federación de Bandas de Música de la Comunitat, aseguró que estudiarán la propuesta de sus socios.

El alcalde subrayó, no obstante, la importancia «sociológica» que a su juicio ha tenido el 15-M. «Es importante que la ciudad conozca que el 15-M cumple diez años y destacar la importancia que tuvo este movimiento porque nos cambió el mapa político español y valenciano y nos cambió a todos. Fue el nacimiento del cambio de gobierno, en 2011 el gobierno del Estado, la Generalitat y el ayuntamiento era uno y ahora es otro». «Yo no digo que sea el 15M pero si sociológicamente fue un movimiento que determinó un cambio».

El alcalde se mostró así dispuesto a revisar su propuesta para integrar al PSPV. «Se puede plantear de otra manera y lo estudiaremos, es un tema menor y no creo que tengo mayor importancia», añadió.

El concejal de Hacienda, el socialista Borja Sanjuán, apuntó ayer por su parte que la instalación de un monolito en reconocimiento a los movimientos ciudadanos debe estar precedido de un debate que podría enmarcarse en el actual concurso internacional de ideas convocado por la Concejalía de Desarrollo Urbano, en manos también del PSPV, para el diseño definitivo y la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento.

Sanjuán abundó ayer en que la plaza del Ayuntamiento no puede patrimonializarse. De hecho, añadió, «una de las consignas del 15M era precisamente la no patrimonialización del espacio público». Cuando haces un reconocimiento a una única realidad por importante que para ti sea la estás situando en una posición de privilegio, adujo Sanjuán, para quien la plaza del Ayuntamiento no puede perder su carácter neutral. «Debe ser un lienzo en blanco» donde todos los colectivos puedan hacer sus reivindicaciones. «Para unos puede ser muy importante el 15-M pero en la plaza «ha habido y habrá otros muchos» acontecimientos.

El concejal socialista apuntó que el debate sobre el monolito en la plaza más emblemática de la ciudad puede tener lugar dentro del proyecto de peatonalización de la plaza que hay en marcha y cuyas bases fueron avanzadas esta misma semana por la vicealcaldesa y se aprobarán en un mes por parte de la Junta de Gobierno.

Para Sanjuán es posible hacer un reconocimiento a la plaza del Ayuntamiento como «lugar de encuentro, celebración y también de reivindicación», si bien con un debate previo. Si los grupos políticos nos ponemos de acuerdo para la concesión de honores y distinciones para la ciudad como no vamos a abrir una reflexión colectiva sobre un espacio tan representativo como la plaza del Ayuntamiento», destacó.