La Asociación de Vecinos de Benifaraig reclama la inmediata apertura del consultorio de atención de primaria de esta pedanía de València. Una vez terminadas las obras en el citado consultorio, «se nos informó desde el Centro de Salud de Juan XXIII que el día 13 de abril se retomaría la atención primaria en el centro auxiliar del pueblo», subraya la presidenta del colectivo, Amparo Guanter.

Sin embargo, numerosos vecinos que tenían fecha para el médico, explican los afectados, se encontraron las puertas de la consulta cerradas cuando acudieron. Por ello, tuvieron que desplazarse al centro de salud de Juan XXIII para averiguar qué pasaba y solicitar una nueva cita para ser atendidos, sin haber sido avisados por la administración de las cancelaciones de las citas anteriores, lamentan.

«Después de casi dos meses continúa cerrado el centro auxiliar de Benifaraig y los vecinos nos tenemos que ir a otros pueblos para ser atendidos por el médico», comenta la presidenta. La asociación presentó por registro de entrada una queja ante la Conselleria de Sanitat y exigió una explicación para saber porqué todavía no se han abierto las puertas del consultorio. Sanitat les ha contestado que durante las obras de rehabilitación se produjo una avería en la fibra óptica. Esta reparación tiene que hacerla Movistar, pero según dice Sanitat a los vecinos, hasta que no se arregle no se puede volver a abrir el consultorio.

«Los vecinos y vecinas no entendemos cómo se puede tardar tanto en solucionar una avería en la fibra óptica y dejar sin servicio a todo un pueblo con una primera necesidad como es la atención médica primaria», remarca la presidenta. No en vano, este cierre afecta a unas 1.000 personas que viven en Benifaraig. El malestar es muy grande porque afecta a mayores que dependen de terceros para desplazarse a otras poblaciones, y también a las familias con pequeños. «No tenemos ni consulta de pediatría ni de enfermería», apunta la secretaria de la asociación de vecinos de Benifaraig, Margarita Estellés. Y añade: «las consultas telefónicas son una odisea, puedes estar todo el día insistiendo y no contestan», lamentó la misma fuente.