La lluvia de barro en Valencia ha dejado de nuevo la ciudad teñida de rojo. Estas precipitaciones se caracterizan por caer con polvo y arena en suspensión que, junto a la lluvia, dejan un sucio rastro de barro allá por donde pasan.

Así, la ciudad ha amanecido hoy con los coches cubiertos por una fina capa de polvo rojizo que ha manchado azoteas, aceras, ventanas y coches. En algunas partes de València, como en la Ciudad de las Artes y las Ciencias, el contraste con el rojo de la lluvia de barro es especialmente notorio.

Según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ara este sábado el predominio de nubes con probabilidad de alguna tormenta con precipitación débil acompañada de barro se situaba principalmente de madrugada y a primeras horas de la mañana. Las probabilidades de lluvia durante toda la jornada rondan el 20 %.