La Asociación de Viviendas de Alquiler para Estancias Cortas de la Comunitat Valenciana (Avaec) lamenta la falta de representatividad de las viviendas de uso turístico (VUT) en el Consell Municipal de Turisme del Ayuntamiento de València, que el pasado lunes votó la incorporación de seis nuevos vocales y finalmente no incluyó a ninguna entidad que defienda los intereses de este sector, que reúne a más de cinco mil apartamentos.

La asociación destaca, además, que esta exclusión supone un incumplimiento de compromiso por parte del equipo de gobierno municipal, que había reconocido públicamente, en encuentros anteriores, que era una anomalía no contar con representantes de las VUT en el Consell Municipal de Turisme y propuso la integración de esta asociación a través de una vocalía.

Avaec, que optaba a la integración de uno de sus miembros como vocal, considera que la presencia de representantes de las VUT es «absolutamente necesaria», así como en otros foros de debate y decisión que afecten a la regulación de este tipo de alojamientos, por «el importante impacto que las medidas que se desarrollan en ellos tienen tanto en los particulares y profesionales que los gestionan como en los usuarios».

La presidenta de Avaec, Pilar Giner, ha recordado que esta asociación «ha mostrado siempre su disponibilidad para la revitalización del turismo y de la economía en general, así como su interés en colaborar con otras entidades en su apuesta por un turismo respetuoso y una buena convivencia ciudadana».

En este sentido, Avaec ya hizo llegar sus propuestas a la Comisión de Trabajo de Apartamentos Turísticos del Consell Municipal de Turisme: la creación de una base de indicadores de incidencia de las VUT en la ciudad mediante una metodología clara; una norma urbanística que dé respuesta específica a los propietarios y gestores de VUT que invirtieron y se inscribieron en el Registro de Turismo convencidos de que no vulneraban el Plan General; la revisión de las actuales regulaciones municipales; la elaboración de una ordenanza de convivencia ciudadana; y la intervención, como representantes del sector, en los foros de debate y decisión que afecten a las viviendas turísticas.