La «Correguda de Joies» de Pinedo podría ser declaradas fiestas de interés turístico provincial próximamente. Para llevarlo a cabo, la Junta de Gobierno Local aprobará mañana el inicio de los trámites para que esta solicitud se convierta en una realidad.
El concejal de Turismo del Ayuntamiento de València, Emiliano García, y la concejala de Pueblos de València, Lucía Beamud, han señalado que «la riqueza cultural que caracteriza nuestro territorio y sus tradiciones de gran arraigo histórico merecen el reconocimiento por parte de toda la ciudad de València».
Por ello, García ha recalcado que «desde el Ayuntamiento de València trabajamos constantemente para poner en valor la riqueza cultural que caracteriza nuestra ciudad y la «Correguda de Joies» es un ejemplo perfecto de las tradiciones que podemos encontrar en nuestros pueblos y en sus fiestas populares».
Por su parte, la concejala Beamud ha señalado que «esta fiesta empezó a aparecer a finales del siglo XVIII y antes se hacía en muchos pueblos de la provincia, pero, hoy en día, continúa estando muy viva en el pueblo de Pinedo».
«Es una fiesta ya centenaria que merece su reconocimiento, arraigada en l’Horta y en sus tradiciones y que, de alguna manera, pone en valor al pueblo de Pinedo y reconoce el valor cultural y popular», añadió la regidora de Pueblos de València.
«Correguda de Joies»
La «Correguda de Joies» consiste en una competición ecuestre en la que los jinetes participantes recorren, a lomos de sus caballos y sin montura, 700 metros de costa mediterránea.
Se trata de una técnica especialmente difícil y arriesgada donde las piernas son las responsables de conseguir mantener el equilibrio sobre la montura.
La carrera se disputa en varios duelos eliminatorios hasta obtener el trofeo, la «joia» o pañuelo de seda que cuelga de una corona de laurel y que, siguiendo la tradición, antes se regalaba a la persona amada al finalizar la competición.
Tradición y actualidad
Desde hace más de 140 años, esta carrera se realiza durante las fiestas mayores de Pinedo, también conocidas como «Festa Grossa», desarrolladas durante la segunda quincena de agosto.
Esta celebración reúne cada año a centenares de personas curiosas de la localidad y de municipios vecinos en la playa de la Creu de la Conca.
En la competición puede participar cualquier jinete mayor de 16 años y, previamente, se realizan revisiones veterinarias en la arena a todos los caballos participantes.
