La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de València aprobó ayer iniciar las actuaciones para resolver, por incumplimiento de los plazos de obras, el contrato para la ejecución del nuevo y demandado jardín de la calle Juan XXIII, en el barrio de Benicalap. Las obras, adjudicadas a la empresa Actua, Servicios y Medio Ambiente, en diciembre de 2020 tenían un plazo de ejecución de cuatro meses, que según han comprobado los inspectores municipales no se ha cumplido. El futuro jardín está, cuando ya se ha superado el plazo de ejecución, sin terminar. De hecho, apenas se han iniciado los trabajos de movimiento de tierras y cimentaciones.

Los técnicos del servicio de Parques y Jardines consideran que las obras del nuevo jardín han sufrido un «retraso injustificado» y los medios destinados a las mismas son «claramente insuficientes».

El 30 de junio de 2021, se efectúa la última visita a las obras, levantándose acta y en la misma los inspectores señalan que a 12 días para la entrega de la obra, el avance económico del certificación ronda un 10%, continuado la obra prácticamente en la misma situación que la detallada en el acta anterior, donde se detectaron más de una docena de deficiencias. La empresa tiene ahora un plazo de diez días naturales para presentar alegaciones a la resolución del contrato.

Observatorio del Ocio

La junta de gobierno también aprobó ayer la creación del observatorio del Ocio y el Turismo, del que finalmente se ha quedado fuera la figura del alcalde de noche que anunció en su momento Joan Ribó. «Ni se descarta ni se incluye», apuntaron ayer los concejales Sergi Campillo y Borja Sanjuán en la rueda de prensa posterior a la junta de gobierno. «Vamos a dejar que el observatorio empiece a funcionar y que se propongan las medidas a implementar», dijeron.

El objetivo del observatorio es ser un foro de debate para generar un ocio y un turismo sostenible para que València sea mejor ciudad para vivir.