El Ayuntamiento de València ha autorizado la compra de una parcela de 150 metros cuadrados en la calle Lluís Despuig, que conectará con otras dos parcelas municipales. En ellas, se levantará la primera escuela infantil de 0 a 3 años en el barrio del Cabanyal-Canyamelar.
En un principio, las parcelas municipales previstas estaban separadas por una planta baja con un patio superior y, al no haber conexión, la ley obligaba a levantar dos escuelas independientes y, por consiguiente, duplicar sus dependencias y el personal contratado. Sin embargo, la compra se acordó de acuerdo con los propietarios porque «el gasto que supondría la construcción de dos escuelas independientes, el mantenimiento de dos edificios y la consiguiente dotación de personal que supondría la construcción de dos escuelas independientes sería muy superior a la diferencia entre el valor de la tasación y el precio de compra del inmueble».
La concejala del área de Educación, Mayte Ibáñez, ha señalado que esta adquisición es «una oportunidad única ante la carencia de suelo de uso educativo en la zona y la ausencia total de infraestructuras para la etapa educativa de 0 a 3 años en esta zona». «Estamos comprometidos con el incremento de la red de escuelas infantiles municipales para garantizar la universalidad de la educación y facilitar la conciliación de la vida familiar y laboral», ha concluido Ibáñez, quien ha recalcado que «es importante ayudar a la gente que no puede hacer frente a una escolarización primeriza por distintos motivos económicos».
Respuesta del PP
Por su parte, el Grupo Municipal Popular ha denunciado la ineficacia del gobierno en la gestión de los fondos europeos destinados a la regeneración del barrio del Cabanyal. Señalan que, según el cronograma del Plan de Implementación del EDUSI, las obras deberían estar terminadas desde el pasado 2019 y, a día de hoy, «el equipo del gobierno se da cuenta de que no tienen los terrenos necesarios para su construcción».
«Estos hechos suponen un nuevo retraso en una actuación fundamental para la revitalización de un barrio que, seis años después se ha ido degradando ante la total inacción del gobierno», señalan.
La concejala popular, Paula Llobet, ha recordado que «todas las actuaciones de este plan deben estar finalizadas a finales de diciembre de este año y, al ritmo de la gestión, no cumpliremos los plazos marcados por la Unión Europea, pudiendo llegar a perder gtan parte de estas ayudas».
Por su parte, los socialistas valencianos recuerdan al PP que «estuvieron 25 años degradando el barrio y expulsando a los vecinos».
