No hay motivos para suspender o aplazar los premios falleros, hemos de normalizar y cerrar un ciclo", ha dicho Joan Ribó, el alcalde de València, en relación a los desperfectos que ha causado el temporal de anoche en las fallas grandes que hoy serán evaluadas por el jurado.
En esta línea, el primer edil ha felicitado a las fallas, los falleros y los artistas falleros porque "da la sensación qe la mayoría de los desperfectos se han podido solucionar y no afectan a la estructura". Con todo, ha resaltado que son unas valoraciones previas a las visitas que realizará durante toda la mañana a los monumentos, a priori, más afectados de las comisiones Pere III El Gran, en Russafa; General Pando-Serrano Flores, en Mestalla; Emili Baró, en Benimaclet y Enginyer Manuel Maese, en la Malva-rosa.
Además, Ribó ha hecho balance de estos primeros días de las fiestas josefinas en las que, dice, "estamos cumpliendo de forma razonable todas las previsiones, la gente está siendo responsable y está cumpliendo el objetivo: disfrutar de las Fallas pero de forma responsable".
"Arquitectos falleros"
Por su parte, el concejal de Seguridad Ciudadana, Aarón Cano, ha puesto en valor el trabajo de los artistas falleros que "más que artistas, son arquitectos falleros" porque son capaces de crear monumentos artísticos que han sabido resistir "muy bien" ante las fuertes lluvias y vientos, más allá de desperfectos en la pintura. "No hay ninguna afección a las estructuras y no hay fallas que supongan un riesgo para la población por posible caída, la valoración es muy satisfactoria", ha apuntado esta mañana, al tiempo que ha resaltado que la ciudad de València tiene "uno de los mejores equipos de emergencias de España y Europa", por lo que hemos de estar "orgullosos".
Ayer por la noche, València vivió una intensa noche de tormenta que amenazó la supervivencia de las Fallas, que duermen en la calle desde hace unos días y oficialmente desde ayer, programado como el día de la "plantà". El viento y la lluvia no pasó desapercibido en algunos monumentos. La más visible es la meditadora de la Plaza del Ayuntamiento, que ha amanecido con un agujero en la barbilla de su busto. La Falla Antigua Campanar peligró ayer con tambaleos por el viento, siendo comprobado por los falleros que no ofrecía peligro de caida, encargándose de asegurar la zona. Por otra parte, en la falla Ferroviaria, los bomberos apuntalaron los daños por el temporal.
