La celebración de una nueva edición de la Copa del América en València «no es una prioridad» para el gobierno de Joan Ribó. Así lo aseguró ayer, en declaraciones a los medios, el alcalde tras la visita que realizó a las obras de la plaza de la Reina. «Estaríamos encantados de que las empresas privadas pudieran abordar el pago del canon» de 70 millones de euros que piden los organizadores de la competición de vela, apuntó el alcalde, quien descartó la idea de una aportación económica del ayuntamiento a la celebración de la 37 edición de las regatas en València.
Ribó recordó, en relación a la candidatura de València para albergar la próxima edición de las regatas en 2024 que ha promovido sin éxito el Real Club Náutico de València, que el Gobierno y las administraciones locales aún están pagando la factura de la edición de 2007. «El Ministerio de Hacienda anunció el martes que el 1 de noviembre se va del Consorcio porque ya se han pagado las deudas que dejó la Copa del América pero el ayuntamiento aún tiene que pagar 12 millones y la Generalitat otros 24» para cancelar el crédito derivado del préstamo principal de 400 millones con el que se pagaron las infraestructuras deportivas.
«Nuestra aportación en estos momentos a la Copa son las infraestructuras», destacó. Y apostilló que «nuestra prioridad en estos momentos es salir del pozo del coronavirus. Todos los recursos van a ir a ese objetivo». «No podemos afrontar unos canones que ni las autoridades de Nueva Zelanda (el país del ganador y organizador de la 37 edición de la Copa) parecen dispuestas a asumir». «Si las empresas privadas hacen frente a ese canon estupendo y nosotros aportaremos lo que tenemos, que son las infraestructuras».
Ribó, por otro lado, se mostró ayer partidario de que la Autoridad Portuaria de València (APV) forme parte de la entidad que sustituirá al Consorcio Valencia 2007 tras su disolución, prevista para noviembre tras la salida del citado organismo del Ministerio de Hacienda. El alcalde defendió que la APV esté en el nuevo ente que gestionará y explotará La Marina, teniendo en cuenta su «proximidad» y que «una parte importante pertenece al puerto».
«Es muy importante que la APV esté en la nueva instancia que gestione La Marina por muchos motivos», expuso el primer edil. Entre ellos ha citado la «proximidad», la idea de que «el puerto debe asumir tareas relacionadas con el municipio de València». «La lámina de agua» también es suya», comentaba el primer mandatario.
Aunque no hay nada oficial, toto apunta a que la Conselleria de Hacienda dejaría su plaza en favor de la de Política Territorial, como adelantaba ayer el conseller Vicent Soler en la Ser. Una vez saldada la deuda por parte del Gobierno, lo lógico es que el departamento de Arcadi España iniciara el nuevo ciclo de la Marina más centrado en la explotación y usos del espacio.
