La Inspección de Trabajo va a sancionar a la Empresa Municipal de Transportes (EMT) a raíz de la denuncia interpuesta por UGT debido a las malas condiciones de las instalaciones provisionales -WC químicos- ubicadas en los finales de líneas, para uso de los conductores y conductoras de los de autobuses, según reveló ayer la secretaria general de UGT en la EMT, Fani Chardí.
Esta sección sindical de UGT, «ante la pasividad por parte de la empresa de subsanar las deficiencias que hacían insalubres el uso de estos baños, interpuso la denuncia en inspección de trabajo en julio de 2020». Ayer, día 28 de septiembre, esta organización recibió la respuesta por parte de dicha Inspección, «sancionando a la EMT y proponiendo su sanción en grado máximo, atendiendo al número de trabajadores afectados y a la inobservancia de las propuestas realizadas por esta sección sindical para su corrección», informó esta dirigente sindical.
Ayer, Levante-EMV trató de recabar la opinión de la dirección de la empresa municipal presidida por el concejal Giuseppe Grezzi y dirigida por la gerente Marta Serrano, sin éxito. No hubo ninguna respuesta sobre lo ocurrido con los váteres portátiles y sobre esta sanción revelada por UGT.
Tensión en el Consejo
La noticia sobre la Inspección de Trabajo trascendió ayer en el día del Consejo de Administración de la empresa. La oposición cargó contra la dirección política de la EMT que encabeza Giuseppe Grezzi.
El PP informó en una nota de prensa que se unió al PSOE y al resto de la oposición «para dejar en minoría a Compromís en el Consejo de Administración de la EMT». La propuesta es «la convocatoria de un consejo extraordinario para que el presidente de la entidad y los abogados contratados den cuenta de la situación de todos los procesos abiertos tanto en el Tribunal de Cuentas como en el juzgado sobre la situación del robo de los 4 millones de euros de las cuentas de la compañía».
Por su parte, el consejero de Ciudadanos Narciso Estellés denunció que como oposición «no se nos haya informado antes desde la EMT de la demanda llevada a cabo al Tribunal de Cuentas por parte de la compañía contra la trabajadora despedida, Celia Zafra».
Para Ciudadanos, «Grezzi intenta ‘recuperar el dinero’ de la estafa yendo contra el patrimonio de trabajadores». Eso, «no tiene calificativo y enturbia mucho el futuro de las relaciones laborales en el seno de la compañía», lamentó Narciso Estellés.
