El absentismo escolar se disparó el curso pasado en la ciudad de Valencia. Hasta 1.598 casos se contabilizaron en los servicios municipales del Ayuntamiento de València, con un caso, incluso, en el que fue necesaria la intervención de la Fiscalía de Menores. Según la respuesta de la Concejalía de Educación al grupo de Compromís, en el curso 2019- 2020, al final del cual se declaró la pandemia, se atendieron 1.081 casos de absentismo escolar, de los cuales 274 fueron nuevos casos detectados desde septiembre a marzo. En el curso 2020-2021, sin embargo, la cifra de casos subió hasta los 1.589, de los cuales 772 eran nuevos para los servicios municipales.
Tanto para un curso como para el otro, las medidas adoptadas fueron visitas a los cetros educativos, llamadas telefónicas a las familias, visitas a los domicilios y en el caso del curso pasado incluso una intervención de la Fiscalía de menores. Solo en tiempos de pandemia se evitaron las visitas para garantizar el cumplimiento de las normas covid.
«Los números de Ribó demuestran que está alejado de las personas», lamentó el portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de València, Fernando Giner, quien ha asegurado que «la ciudad hace aguas en asuntos vitales para la calidad de vida de los ciudadanos y que golpean duramente a las familias, como el absentismo escolar».
«El aumento de absentismo respecto al curso escolar 2019-2020, que ha atendido el Programa de Absentismo Escolar Municipal, es francamente llamativo», dijo el portavoz naranja, quien insistió en la necesidad de «emprender medidas urgentes para frenar esta realidad». «Tenemos que ser conscientes de las consecuencias que tiene este problema para nuestros jóvenes, para sus familias y para la convivencia de la ciudad», añadió.
Por otra parte, Giner ha criticado a Ribó por reconocer que la Policía Local solo cuenta con dos sonómetros «para combatir el botellón y velar por el descanso de los vecinos». «Además, sólo uno de los dos aparatos proporciona datos técnicos para poder realizar un informe, el otro sólo mide los decibelios y es el que se utiliza para verbenas y ese tipo de espectáculos», detalló.
