El Consell Agrari Municipal ha empezado a instalar, a modo de prueba piloto, vallas para el cierre al paso de vehículos en varios caminos rurales de titularidad municipal, que forman parte del sistema viario de la ciudad y que hasta ahora están abiertos al tránsito rodado.

Cierre de caminos rurales por los robos

La medida llega tras las quejas de distintas asociaciones de vecinos de los pueblos y zonas rurales de la ciudad por los robos constantes de cosechas . El objetivo es evitar los hurtos de producción agrícola en unos casos, pero también el vertido de escombros incontrolados en otros, como ocurre con el vallado de la Punta, mediante el uso de puertas, según explicaron fuentes de la Concejalía de Pueblos.

En el caso de la huerta de Campanar, la Asociación de Vecinos y Vecinas solicitó en diciembre de 2019 el cierre provisional de caminos agrarios en la huerta de Campanar-Benimàmet con la finalidad de evitar, o al menos reducir, los robos de la producción agrícola en esta zona rural. La petición del vecindario se ha concretado en el cierre del camino durante el periodo comprendido entre los meses de noviembre a marzo, es decir, durante la temporada de recogida de la alcachofa, que es cuando más hurtos se producen en el campo.

Los vecinos de Campanar se han quejado igualmente de los conflictos de movilidad los fines de semana a causa del estacionamiento informal de vehículos en algunos caminos que conectan con Benimàmet, además de hurtos en las parcelas agrícolas.

Los vecinos de la Punta, por su parte, también reclamaron la instalación de dos puertas, una al este y otra al oeste, de un camino que se usa para realizar vertidos incontrolados. Petición que también ha sido atendida por el ayuntamiento.