La ciudad de València ha alcanzado un 85 por ciento de ocupación turística durante los primeros días del puente de diciembre. Un dato que habla de la «reactivación de la ciudad», en palabras del concejal de Turismo, Emiliano García, y que refleja que la concatenación de días festivos no ha sido desaprovechado por el visitante a pesar de la enorme competencia que suponen, por ejemplo, ofertas como la de las estaciones de esquí.

Esa primera parte ha estado, además, muy condicionada por la celebración del maratón, que trajo el más importante contingente de «Turismo Deportivo» del año, y que queda ya institucionalizado como preámbulo del puente. El año que viene, al celebrarse el 4, quedará en un particular trenzado de festivo-laborable-festivo-laborable-festivo hasta el día 8. Y una demostración de la importancia de la prueba es que el edil también reconoció que la segunda parte del puente baja la ocupación a un 65 por ciento. «Estamos muy contentos y el sector tiene la moral muy alta» aseguró Emiliano García. Ya días atrás, el director de VisitValencia, Antoni Bernabé, señaló el segundo semestre de 2021 como el inicio del repunte dentro de un año «que ha seguido siendo muy complicado, porque siguió habiendo muchas restricciones a la movilidad al inicio. La recuperación ha empezado sobre todo a partir de julio, pero el 85 por ciento de ocupación de este puente supera en varios puntos las medias detectadas en el mes de octubre, el último que está medido.

Ambientazo en la calle

Y además de los números, las sensaciones y las decisiones. Indicativo es, por ejemplo, el ambiente en la plaza del Ayuntamiento, donde la asociación de comerciantes hace llamamientos a acudir a la pista de hielo en horarios matinales porque en las sesiones vespertinas la afluencia «ha rebasado todas nuestras previsiones». Por eso, cuando se compran las entradas, se les recuerda que por la mañana, que además el hielo está mejor, también es una buena opción si se puede acudir».

La pista tiene reducido a la mitad su aforo, «por debajo incluso de lo que podríamos establecer», asegura la portavoz y gerente de la asociación, Julia Martínez, «pero lo que nos es indicativo es la demanda y la compra de entradas. Da la sensación, sin duda, de que había muchas ganas de volver a patinar» y más allá de algo que se detecta con un simple vistazo: «ya con tantos años de tradición se nota que la gente patina cada vez mejor». Una afluencia extensible al carrusel, «del que teníamos dudas por la nueva ubicación, junto a Correos, pero no tenemos ninguna queja de cómo está resultando». Tanto es así que «el año que viene incluso estableceremos horario vespertino para el Tren de la Navidad el día del maratón, que normalmente no lo hacíamos y vemos que vale la pena».