Las obras de mejora en el Mercado de Algirós obligará a sacar hasta 6 puestos de la zona de pescadería a un tramo de la plaza de Plaza San Felipe Neri durante 3 meses, mientras se ejecutan unas reparaciones en el forjado para evitar posibles hundimientos en la estructura. Tal como informan desde la concejalía de Mercados, que dirige Carlos Galiana, la rehabilitación con el mercado implicará que la plaza contigua se hará peatonal durante este tiempo y por tanto se cerrará al tráfico mientras se efectúan las mejoras en la estructura. En este espacio se ubicarán las 6 casetas del pescado hasta que acaben las obras, que empiezan el 11 de enero y han sido pactadas con los vendedores para que arranquen después de las fiestas navideñas y de Reyes, que son fechas de mucha venta.

El coste total de la actuación será de 582.712 €, incluyendo la dirección facultativa y la coordinación de seguridad. Las humedades son la razón principal que han obligado a actuar en este mercado municipal. El uso intensivo durante años de agua directa para la limpieza de las zonas de la pescadería es un problema común en los diferentes mercados municipales porque afecta a los forjados, tabiquería, mostradores y resto de instalaciones. Estos puestos además hacen un uso intensivo de hielo para mantener el producto fresco que acaba también filtrándose por todas las estructuras. La reforma englobará la reparación del forjado sótano del edificio del mercado, con patologías estructurales provocadas por filtraciones de agua y la renovación de instalaciones técnicas afectadas tanto de iluminación como ventilación.

El Mercado de Algirós está situado en el barrio del mismo nombre en la Plaza San Felipe Neri 15, delimitada por las calles Puebla de Farnals, Luis Millán y Rugat de València. Gran parte de los mercados municipales adolece del mismo problema ya que las zonas dedicadas a la pescadería se han ido limpiado tradicionalmente con un uso intensivo de agua para poder deshacer el hielo que mantiene el producto fresco.

La mayoría de estas instalaciones datan de la década de finales de los 70 , 80 y adolecen de la misma problemática. Se han ejecutado trabajos similares en el Mercado Central, el de Russafa y el de Castilla, en los que se han reparado las patologías existentes por la filtraciones de agua y se han sustituido las instalaciones y los materiales para hacer las más eficientes.

Según el concejal Carlos Galiana, «los gobiernos del Partido Popular en València habían dejado abandonados a los mercados municipales durante sucesivos años, y eso ha sido una carencia que hemos tenido que arreglar a base de reformas y obras de gran envergadura en los forjados y las estructuras de estos recintos». Para el gobierno encabezado por Joan Ribó «los mercados municipales son espacios a potenciar porque van en la línea de una ciudad mediterránea, con huerta y con comercio de proximidad que fortalece nuestros barrios», añade el regidor.

Galiana ha destacado que Rojas Clemente va a ser objeto de una ambiciosa actuación en 2022 para solventar los problemas que sufre. Además, Galiana afirma que los populares gastaron entre 2001 y 2015, un total de 615.000 euros, en este mercado, mientras que en la mitad de tiempo el Rialto ya lleva invertidos 736.000 euros y el ejercicio próximo se hará otro esfuerzo.