La Autoridad Portuaria de València (APV) ha incluido en su presupuesto de este año 15 millones de euros para la regeneración de las playas del sur de València. Una partida, inicialmente de tres millones, que la APV tenía reservada desde 2007 para compensar la regresión derivada de las obras del canal de acceso y la ampliación norte que no se ha dispuesto todavía y que en abril de 2021, a la vista de la imparable regresión de las playas del Saler y la Garrofera, se incrementó hasta los 15 millones de euros.
Esta aportación está a la espera de que Costas disponga de ella. La aportación del puerto a la regeneración de las playas del sur de València, cuya regresión se debe en gran medida al efecto barrera del puerto, así como a la ausencia de sedimentos y aportes fluviales sumado a los fuertes temporales de los últimos años vinculados al cambio climático, representa más de la mitad del coste total del proyecto de regeneración, presupuestado en 28 millones de euros y que prevé la extracción y trasvase a las playas del Saler de tres millones de metros cúbicos de arena de los fondos marinos de Sueca y Cullera. El puerto, en plena disputa de la Conselleria de Emergencia Climática con Puertos del Estado a cuenta de la ampliación norte del recinto portuario, urge a aprobar el proyecto de regeneración de las playas del sur. Todo ello, después de que la Concejalía de Ecología Urbana solicitase a la Dirección General de Costas la paralización del plan de regeneración de la playa de la Creu, una de las afectadas por la regresión del litoral del parque natural de la Devesa, impulsada por la Autoridad Portuaria hace ahora un año. El proyecto, que preveía el aporte de 39.000 metros cúbicos de arena a esta playa para la fijación de las dunas, está bloqueado desde entonces ante los informes del Ayuntamiento de València que abogaban por una solución integral que tuviese en cuenta además proyectos pendientes como la recuperación del búnker del Saler y su entorno.
El plan de regeneración de las playas del Saler y la Garrofera ha sido aprobado definitivamente y publicado ya en el boletín oficial del Estado, después de obtener la declaración de impacto ambiental favorable (DIA) en agosto pasado. Sin embargo, la Dirección General de Costas del Ministerio de Transición Ecológica solo ha presupuestado 430.000 de los 28 millones de coste estimado del proyecto.
