Durante los últimos meses la EMT ha renovado gran parte de su flota de autobuses. De hecho, algunos de los autobuses que ha comprado son eléctricos, contribuyendo de esta forma a construir una ciudad más sostenible.
Sin embargo, esta renovación en la flota ha servido para algo más que para modernizar los autobuses públicos que circularán por València. La EMT y el consistorio han decidido donar los autobuses a Cooperación Internacional - IYC, una ONG que se dedica a ayudar a niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad en 30 países.
Gracias a los autobuses que ha donado la EMT de València los niños y niñas de una Bignona, una ciudad de Senegal, podrán ir al colegio. El alcalde de València, Joan Ribó, ha aplaudido también la iniciativa en una publicación en su cuenta de Twitter.
La empresa valenciana de transporte público ha demostrado una vez más su compromiso de evolucionar hacia una empresa cada vez más sostenible y comprometida con el medio ambiente, donando los autobuses que retiran para que tengan 'una segunda vida' y, por otra parte, incluyendo muchos vehículos que funcionarán con energías renovables.
