En la pared, el tejado, la mesa. En cualquier parte pero en esta ocasión con casi un mes de adelanto: millones de "rantelles" han sobrevolado la ciudad de València durante los últimos días. Es la consecuencia no de la inundacion de la Albufera, que suele ser lo habitual en el mes de junio, sino de las condiciones irregulares vividas en los últimos días, en los que se han ido combinando los episodios de lluvia con los de fuerte calor.

La consecuencia ha sido al aparición de estos diminutos insectos, que parecen mosquitos, pero no lo son. Las llamadas anunciando la presencia masiva se han multiplicado en los últimos días pero, tal como aseguraban en Lokimica, el laboratorio dedicado al control de plagas en el Ayuntamiento de València, "ha afectado a bastantes zonas del litoral mediterráneo".

En estos casos, la única gran molestia es la suciedad que pueda generar la presencia tanto de los ejemplares vivos como los muertos. "Tienen un ciclo de vida muy corto, de apenas unos días. En cuanto copulan cumplen su ciclo vital y mueren" asegura el doctor Rubén Bueno.

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Los desbordados olivos de Castellar-Oliveral Moisés Domínguez

Por qué salen las 'rentelles'

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La procedencia son zonas de acúmulos de agua, bien por aportaciones de lluvia o humanas en zonas de lagos o cultivos como los arrozales o acequias. En este caso hay que atribuirlo a los charcos generados por las lluvias o a situaciones no habituales, como el caudal de agua que se mantiene en el nuevo cauce desde los grandes episodios de tormentas.

El concejal de Sanidad y Salud Pública, Emiliano Garcia, ha explicado que se trata de las habituales rentelles "que por estas fechas eclosionan cada año y que son absolutamente inofensivas. Se trata de unos insectos que no tienen nada que ver con los mosquitos y que no pican. Además, tiene una función beneficiosa para el medio ambiente ya que sirve de alimento para las aves y murciélagos".