La biblioteca municipal de Orriols, que estaba ubicada en un bajo de pequeñas dimensiones y en condiciones precarias, lleva 4 meses cerrada y no hay fecha concreta para su apertura. Dejó de funcionar en febrero, ante la expectativa inminente de que iba a ser trasladada a l’Alqueria d’Albors, han informado fuentes vecinales a Levante-EMV.
En realidad, este servicio cultural está previsto que se traslade a la rehabilitada construcción histórica, sin embargo, se ha cerrado la biblioteca situada en la calle San Juan Bosco y no se ha completado el traslado a la nueva ubicación. El resultado es que los residentes carecen de esta oferta cultural, más importante si cabe para un barrio que carece de numerosas infraestructuras, tal como han denunciado en repetidas ocasiones los colectivos cívicos y sociales del barrio. Además, cuando ya se acercan las vacaciones estivales y el público tiene más tiempo para leer.
Como nota curiosa, hay al menos 15 o 20 cajas de libros antiguos, que están depositados en una droguería del barrio. Y aunque los técnicos del Ayuntamiento de València entienden que no están en buen estado para ser trasladados a la nueva ubicación en l’Alqueria d’Albors, los componentes de la plataforma Orriols en Lucha han comenzado a repartirlos gratuitamente a los vecinos que quieren reciclarlos y llevárselos a sus casas.
De hecho, el lunes pasado se distribuyeron cien ejemplares, dentro de estas actividades que realizan los ciudadanos se Orriols para reactivar el tejido asociativo y cultural de la barriada y ocupar los espacios urbanos donde los delincuentes trafican y generan problemas de convivencia. Sobre la rehabilitación de l’Alqueria d’Albors, la distribución futura de sus espacios interiores tampoco gusta a los vecinos consultados por este diario.
En el edificio histórico, que según lo anunciado por el Ayuntamiento de València, tiempo atrás ya tendría que estar en funcionamiento desde abril al menos, está previsto ubicar en la parte superior un centro cultural y para exposiciones, y en el bajo, una biblioteca.
En la práctica, la superficie de ambos recursos culturales «es insuficiente», para los vecinos consultados, ya que la «nueva» biblioteca cuando se confirme el traslado a l’Alqueria, será más pequeña aún que la que ya había en la calle San Juan Bosco.
Respecto a la sala dedicada a actividades culturales, tampoco «es lo suficientemente grande» como para colmar las aspiraciones de los residentes.
