El alcalde de València, Joan Ribó, se ha comprometido a buscar la manera de que permanezcan en sus puestos "la gran mayoría, por no decir todos" los interinos del ayuntamiento, que son alrededor de 1.800 en la actualidad. Lo ha hecho después de reunirse con la plataforma Interin@s en Acción, con quienes ha tratado sobre el proceso de estabilización del personal municipal temporal, que se encuentra en estos momentos en proceso de negociación con las secciones sindicales, en el marco de la Ley 20/2021, de 28 de diciembre, de medidas urgentes para la reducción de la temporalidad en el empleo público.
Con este pronunciamiento, el alcalde modera el enconado conflicto que mantienen los sindicatos con la Concejalía de Personal que dirige Luisa Notario, que en sus bases para estabilizar al personal interino otorga 1,5 puntos para quienes ya trabajan en el ayuntamiento y 1 punto para los de fuera. Para los sindicatos, eso supone que el 80% de los interinos se irían a la calle, por lo que ellos proponen una relación de 4-1 en esa baremación para que la inmensa mayoría se quede.
El conflicto ha llegado a tal punto que los trabajadores han iniciado movilizaciones ante el consistorio a la espera de que se pongan sobre la mesa nuevas bases.
En medio de este enfrentamiento, el alcalde, Joan Ribó, ha aprovechado su reunión con Interin@s en Acción para acercar posturas a sindicatos y trabajadores. A falta de los problemas legales que puedan presentarse, el alcalde cree que es posible acercarse a esa relación de 4 puntos a 1 que proponen las centrales sindicales y estabilizar a la mayoría de los afectados.
Ribó recuerda que València es una ciudad de 800.000 habitantes y que su ayuntamiento no es lo mismo que el de un pueblo más pequeño, en referencia al posible llegada de trabajadores de otros municipios al amparo de este concurso.
"El Ayuntamiento de València cuenta actualmente con 1.800 trabajadores en situación de interinidad, lo que supone un porcentaje muy grande”, en palabras del alcalde, quien ha defendido que “la estabilidad de las personas trabajadoras públicas es fundamental para el buen trabajo del Ayuntamiento”. Por ello, el alcalde ha ofrecido a la plataforma “todas las garantías de que se va a hacer todo lo posible para conseguir que la inmensa mayoría de las personas interinas puedan estabilizarse, con la única limitación de la normativa legal”.
La representante de la plataforma, Diana Vázquez, ha reclamado, por su parte, “unas bases generales garantistas, que permitan que ningún empleado de la casa se vaya a la calle”, y ha agradecido el apoyo del alcalde a sus reivindicaciones. Vázquez ha subrayado la importancia de la unidad sindical, y ha pedido que en el contexto de la negociación “se escuchen y se consideren las propuestas que han planteado de manera conjunta los cinco sindicatos, con la voluntad de que en València se apliquen las propuestas que ya se están acordando en otros territorios y en otras administraciones”.
El alcalde se ha mostrado convencido de que “nos podremos aproximar bastante” a las propuestas sindicales, y ha destacado “que no es lo mismo trabajar en un ayuntamiento grande como el de València que en otro de menor tamaño, ya que el trabajo no es el mismo ni las condiciones; y los mecanismos de evaluación que nosotros hemos estado impulsando en los últimos años en València es algo que no se ha hecho en otros ayuntamientos más pequeños, ni tampoco en la mayoría de los grandes; por tanto –ha concluido- es razonable reconocer las diferencias”.
Cautelas en los sindicatos
Este posicionamiento conciliador de Ribó ha sido recibido con muchas cautelas entre los sindicatos. Arantxa Millán, secretaria general de UGT en el Ayuntamiento de València, asegura que la puntuación de 4-1 que ellos pidieron en principio y que Ribó cree que puede cumplir, debe estar acompañada de muchas otras medidas igual de importantes. Su objetivo final sería que la experiencia contará un 70% en la evaluación final y que el resto de cuestiones sumara el restante 30%. Millán considera, además, que esas propuestas y buenas intenciones del alcalde han de verse reflejadas en un documento y no quedarse en palabras. Por lo que a ellos respecta, ya trabajan en unas nuevas bases que presentarán próximamente a Luisa Notario, tal como les había pedido. Y entre tanto, las movilizaciones siguen adelante.
