El Sindicato del Barrio Malilla asegura que lleva utilizando, desde hace más de un año, la Alquería Popular para su red de alimentos, sus actividades culturales y las asambleas abiertas. Además, el organismo indica que el edificio es empleado como centro de operaciones por la lucha contra los desahucios y denuncia que el Ayuntamiento "quiere desalojar a sus miembros".

En abril de 2021, el Sindicato "Construyendo Malilla" y su red de alimentos "Malilla Solidaria" consiguió que el consistorio le cediera una de las alquerías del barrio para el uso vecinal, "después de décadas de abandono institucional del espacio", afirman. Desde el Sindicato aseguran que, "durante todo este tiempo, su actividad ha sido fecunda: realizando repartos de alimentos, asambleas en las que se solucionan problemas de vivienda, sobre todo desahucios, y actividades contra la violencia machista y de promoción de la cultura, además de iniciativas para garantizar un ocio alternativo y gratuito para jóvenes del barrio. Por lo que respecta a estas últimas, destacan, entre otras, "el cine a la fresca" y los torneos deportivos".

El Sindicato declara que "el Ayuntamiento decidió, hace unos meses, que la alquería tenía que salir a concurso público para ser sorteada entre diferentes entidades, sin ofrecer alternativa alguna al Sindicato del Barrio de Malilla". La asociación denuncia que "el consistorio obliga a competir a las diferentes asociaciones por un local, habiendo decenas de espacios vacíos en la ciudad", añadiendo que los criterios del concurso "están diseñados, a priori, para que el Sindicato quede fuera de juego". "No queremos competir con asociaciones culturales, de ayuda humanitaria o deportivas, porque son tan necesarias como la nuestra". "La Iglesia católica tiene centenares de locales vacíos en esta ciudad, pero es intocable. El Ayuntamiento prefiere abrir una guerra contra quienes paramos desahucios", aseguran.