Tres años después de que el Ayuntamiento de València se comprometiera a ceder a Alboraia la parcela urbana de su propiedad ocupada por un polideportivo del municipio vecino, la segregación de los terrenos, ubicados en la frontera de ambos términos, no termina de llegar. El Ayuntamiento de Alboraia, gobernado por el socialista Miguel Chavarría presiona para desbloquear la cesión de la parcela de 40.000 metros cuadrados y ahorrarse así los 50.000 euros del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que todos los años desde hace décadas paga al cap i casal por la ocupación de los terrenos del polideportivo. El pasado 1 de julio el gobierno municipal de Alboraia remitió un oficio al de València, gobernado también por el PSPV en coaliciación con Compromís, en el que expone que el pleno de la citada población aprobó el 26 de mayo de 2022 el inicio de expediente de segregación de los terrenos y definir la nueva delimitación de los términos municipales.

Un oficio ante el cual el Ayuntamiento de València, en concreto, la concejalía de Hacienda, responsable del servicio municipal de Territorio y Padrón, con el socialista Borja Sanjuán al frente, ha respondido aclarando que aún no está en condiciones de iniciar dicha segregación porque se están recabando informes de distintos departamentos, entre ellos jurídicos y fiscales, así como de la Generalitat al suponer el proceso de segregación alteración de dos términos municipales.

La segregación de la parcela perteneciente a València sobre la que Alboraia construyó un polideportivo se remonta al primer gobierno de Rita Barberá que en 1991 inició junto con el ayuntamiento de Alboraia los trámites para regularizar los terrenos. El expediente, sin embargo, se bloqueó y al cabo de varios años la Conselleria de Administración Pública lo dio por caducado. En 2018, ambos ayuntamientos, en manos ya de gobiernos progresistas, retomaron el proceso para buscar una "solución de mutuo acuerdo". El anterior concejal de Hacienda, Ramón Vilar, y la concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, se comprometieron entonces a resolver la situación de estos terrenos. Sin embargo, la tramitación no está resultando tan ágil como espera Alboraria, asfixiada por más de cien millones de deuda, que de nuevo tendrá que abonar este año el pago del IBI a València.

En 2019, el Ayuntamiento de Alboraia presentó al de València un escrito informando de la incoación de expediente de segregación de parte del término municipal de València para agregarlo al de Alboraia y la apertura del trámite de información pública ante el cual no alegó nada el "cap i casal". En diciembre de 2021 fue nombrada la comisión de delimitación municipal en aplicación de la normativa autonómica y del Reglamento de Población y demarcación Territorial (RPDT) que regula esta tipo de procesos y que establece como requisito la apertura de dos expedientes municipales de segregación por parte de ambos municipios y la adopción de acuerdos plenarios de iniciación de ambos. Mientras Alboraia ya ha completado dicho expediente, y lo aprobó el pasado 26 de mayo, remitiendo el acuerdo al cap i casal este mes de julio, el Ayuntamiento de València sigue recabando informes. Así lo reconoce en el oficio remitido a Alboraia donde asegura que "no se encuentra en disposición, en este momento, de manifestar su conformidad a esta propuesta de segregación del término municipal, en tanto en cuanto no finalice la tramitación de su expediente de segregación, solicitando los informes pertinentes que requiere la normativa aplicable"