Las nuevas zonas verdes -con aparcamiento exclusivo- o naranjas -uso preferencial para los vecinos del barrio de Russafa pero compartido con otros ciudadanos de fuera del barrio- han arrancado con multitud de dudas por parte de los conductores que no sabían si podían aparcar en estas plazas o cuánto hay que pagar para poder estacionar; y con quejas de los negocios de la zona porque creen que la medida les perjudica ya que reducirá la afluencia de clientes.

La imagen más llamativa que ha dejado la entrada en vigor de esta medida ha sido que varias calles, con aparcamiento reservado a los residentes o apto también para la gente de fuera del barrio previo pago, se han quedado vacías durante muchas horas. Por ejemplo, entre las 13 y las 14,30 horas de la tarde, en la calle Sevilla y la calle Cádiz, que son ahora de uso restringido a los residentes, no había prácticamente vehículos aparcados. Y en la calle de Tomasos, también había muchos espacios sin ocupar.

En Doctor Sumsi, zona naranja, donde se puede estacionar previo pago, había sitios libres durante toda la mañana, para asombro de los negocios de la zona, que no pueden aparcar en su calle dado que nadie los autoriza. La calle Alcoi -naranja- estaba totalmente vacía hacia la una de la tarde y la concurrida calle Dénia, también "taronja" mostraba bastantes huecos sin ocupar.

Calle Cádiz, nueva zona verde con varios huecos libres. German Caballero

En la calle Segorbe, también de rotación, había al menos tres plazas marcadas, una parte con naranja y el resto en blanco. Eso sí, las plazas en batería del resto de la calle sí estaban bien pintadas y en "taronja".

Bastante llamativo es lo ocurrido en Maties Perelló y Regne de València, que siguen pintadas como zona azul, pero en las que hay unos carteles que indican que por obras se prohíbe estacionar. Pues bien, según pudo comprobar Levante-EMV estaban llenas de coches.

Calle Alcoi, con zona de naranja, apta para residentes y no residentes, vacía. German Caballero

Otra cuestión también, que deberá aclarar el Ayuntamiento de València, es qué pasa con algunas zonas de carga y descarga que han sido pintadas como plazas naranjas, pero que en las que la cruz amarilla del suelo no se ha borrado. La duda es si por el día están habilitadas como zona de uso gratuito para transportistas y si a partir de cierta hora, las 20 horas, pueden ser utilizadas por residentes.

También pudo comprobar este periódico que se ha llenado el barrio con multitud de carteles avisando a vecinos y conductores de que se han puesto en marcha, literalmente, las zonas verdes y naranja de estacionamiento regulado en Russafa.

Igualmente, en turismos que no están autorizados y que han aparcado tanto en zona verde como naranja, hoy mismo ya se les ha puesto un cartel en el parabrisas, advirtiéndoles el Ayuntamiento de València que su vehículo "está estacionado de manera incorrecta". Asimismo, fuentes de la concejalía de Movilidad Sostenible han informado que quienes hayan estacionado sin permisos, ni haberse sacado la tarjeta naranja o verde, serán sancionados.

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"Hoy, por ser el primer día, se ha hecho una información extensa por la zona para que alguna persona que no se haya enterado, tenga información sobre la puesta en marcha de la zona de residentes. Dicho esto, la zona empieza a funcionar desde el primer día", afirman fuentes del departamento dirigido por el concejal Giuseppe Grezzi.

Por tanto , se va a multar a todo el mundo que haya estacionado de forma incorrecta.