Turianova, el barrio con 2.300 viviendas promovido a espaldas de la nueva Fe de Malilla, ya es parte de la ciudad. Los responsables de AQ Acentor y Proalival hicieron esta mañana entrega formal de la urbanizacion, cuyos accesos y conexiones viarias ya están en servicio, a la concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez. El ayuntamiento asume así la gestión de los jardines, calles, alumbrado y recogida de basura del nuevo barrio que rediseña además la fachada sur de la ciudad y sus accesos.
La vicealcaldesa ha valorado la transformación que ha sufrido esta bolsa de suelo edificable inaccesible y rodeada de grandes y ruidosas infraestructuras de tráfico y torres de alta tensión, atascada durante años por su escaso atractivo para los inversores, que ahora es un nuevo barrio con torres residenciales con piscina, zonas deportivas y amplios espacios verdes, incluida una colina artificial que amortigua el ruido de la autovía.
«Un obrón», tal como lo ha calificado Sandra Gómez que ha vuelto a lanzar la idea de que la nueva línea L12 de Metrovalencia que conectará el centro con la nueva Fe llegue «en un futuro» hasta esta barrio. Gómez aseguró que la L12 «tendría que llegar» y será una de las infraestructuras que negociarán cuando el barrio se empiece a consolidar con la gerencia de Ferrocarrils de la Generalitat (FGV).
«La L12 tendría que llegar»
Turianova es uno de los primeros barrios donde se ha aplicado el concepto de la ciudad de «15 minutos» y compacta, con edificios en altura que permiten liberar el 75% del suelo para viales, dotaciones y zonas verdes. Las torres de viviendas, afirman los promotores, solo ocupan el 5% de la superficie. La movilidad tendrá que llegar de la mano de la EMT con una nueva línea, según ha apuntado Sandra Gómez, y en un futuro del tranvía (L12), para el que se ha reservado espacio en el centro del nuevo puente de Malilla.
También en un futuro habrá centros educativos, aún sin plazo, y un gran centro comercial, este sí se anuncia para 2023-24.
En el barrio, que construye el grupo Bertolín, ya hay terminadas 440 viviendas, más de la mitad de las cuales están habitadas ya. En concreto, hay dos torres de 14 plantas con cerca de 300 viviendas de alquiler que se empezaron a comercializar en mayo y que ya están al 40% de ocupación. Hay otra ya terminada de viviendas de renta libre donde han empezado a instalarse los nuevos propietarios y se construye además otro edificio para VPO. En total el nuevo barrio, con una superficie equivalente a 50 campos de fútbol (300.000 metros cuadrados) contará con 2.300 viviendas. Por Turianova, donde las grúas siguen trabajando, ya se ven vecinos por la calle.
Los precios de renta libre en Turianova se sitúan entre 170.000 euros para una vivienda de dos habitaciones y los 300.000 de una de cuatro. Alquilar en Turianova, cuyas viviendas cuentan con piscina comunitaria y zona de coworking, cuesta entre 600 y mil euros. Los precios del nuevo barrio, que empezó siendo una promoción de precios asequibles para atraer inversores a una zona donde pocos veían posibilidades, se están ajustando en función de la evolución del barrio.
El nuevo barrio se ha desarrollado siguiendo el concepto de barrio inteligente o «smart city». Se trata de un barrio sostenible porque se construye en altura, liberando suelo para dotaciones públicas y zonas verdes, según ha explicado la directora general de Grupo Bertolín, María Bertolín.
Las obras de urbanización, que arrancaron 2019, incluyen el desdoblamiento del nuevo puente de Malilla, ya finalizado y puesto en servicio, que duplica la capacidad de las conexiones (entradas y salidas) del bulevar Sur con la V-30. Asimismo, también incluyen, la mejora de los accesos de la ciudad de Valencia a la V-30 y V-31 con una vía colectora que absorberá el tráfico desde Alicante y la modificación del enlace entre V-30 y V-31 que incorpora mejoras geométricas, funcionales, de señalización y de seguridad vial. El puente construido para enlazar el PAI con la V-30 se tuvo que construir en talleres y desplazar en bloque hasta su actual ubicación dado lo ajustados de los plazos del Ministerio de Fomento de ocupación de la vía.
Dos grandes obras de ingeniería que ayudarán a descongestionar del tráfico en el sur de la ciudad, han apuntado los promotores, que han invitado tras la experiencia a invertir en València. «El capital puede venir a invertir, hay que acabar con ese miedo» aseguró el director de negocio de Bertolín, Antonio Piles, en alusión al exceso de burocracia y los retrasos en las licencias que denuncian las promotoras valencianas.
AQ Acentor cuenta con otros tres desarrollos en ejecución, que sumarán 564 nuevas viviendas que se entregarán entre 2023 y 2025.
El centro comercial para 2024
El centro comercial con hotel y oficinas proyectado en la bolsa de suelo terciario de 70.000 m2 de Turianova, uno de los grandes reclamos del sector, abrirá «en 2023-24». Así lo explicaron los responsables de AQ Acentor, la promotora del nuevo barrio. Esta gran centro terciario multifuncional bautizado como Infinity y diseñado por Fernando Sánchez de las Matas, albergará actividades de ocio, comerciales, de oficinas y coworking, así como de uso residencial colectivo con residencias de la tercera edad, estudiantes y coliving.
Barrio «asequible»
La concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez destacó ayer durante la recepción de la urbanización del barrio que Turianova aumentará el parque público de vivienda de alquiler y permite acceder a la compra de vivienda porque los precios son «muy asequibles». Turianova comercializa viviendas de dos habitaciones desde 170.000 euros.
El director de desarrollo de negocio y consejero en AQ Acentor, Raúl Moreno, aseguró ayer que con la urbanización del bacon Turianova « todos los valencianos reciben un nuevo barrio con zonas verdes donde se proveen oportunidades de negocio, socialización, ocio y deporte.
El director de Negocio de Bertolín, Antonio Piles, destacó por su parte a colaboración público-privada «imprescindible para este nuevo barrio»» cuyas obras arrancaron hace tres años.
