Concha Antelo Rey es octogenaria y tiene cierto grado de movilidad reducida. Durante años, se ha visto obligada a coger un autobús para tener que ir al médico, en Sant Isidre, bastante lejos de su casa. A partir de mañana, tanto ella como otras 20.000 personas ya no necesitarán desplazarse para ser atendidas porque, tras un año y medio de obras, abre sus puertas el centro de salud de Tres Forques

«Está fenomenal y nos viene de perlas porque teníamos que ir al médico en autobús y ya tengo ochenta años», indicaba la mujer durante la visita al edificio, que tuvo lugar ayer con la presencia del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, el conseller de Sanidad, Miguel Mínguez, el alcalde, Joan Ribó, y la vicealcaldesa, Sandra Gómez. «Estamos contentísimos», señalaba la vecina tras recorrer las instalaciones. 

El nuevo centro sanitario, de 3.000 metros cuadrados, se habilitado en un antiguo edificio de oficinas de la administración autonómica que fue cedido por laGeneralitat y ha requerido una inversión de cerca de tres millones de euros. Cuenta con 22 consultas de medicina familiar, base de ambulancias SAMU y área de pediatría y maternidad. En la planta baja se ha habilitado una sala de extracciones.

En él se atenderá a unos 20.000 vecinos y vecinas que actualmente se encuentran desplazados a otros centros de salud de la ciudad.

Fuentes de la conselleria explicaban a Levante-EMV que se ha remitido una carta a todas las personas que ahora podrán acudir a este centro para que elijan si quieren cambiar o prefieren quedarse en actual. Para mañana lunes ya se han dado citas que se atenderán en el nuevo edificio.

Una larga lucha vecinal

Este proyecto permite a Tres Forques disponer, tras décadas de reivindicación, de un espacio sanitario. Porque la del centro de salud es la historia de una larga lucha vecinal, como declaraba el presidente de la asociación de vecinos, Antonio Góngora. «Han sido más de 20 años de lucha que ahora hemos conseguido entre todos los vecinos del barrio», apuntaba satisfecho y reconocía que «también hemos tenido voluntad política» para que se cumpliera esa aspiración vecinal.

Emili, miembro de la entidad, explicaba que fueron los propios vecinos y vecinas quienes propusieron a la Conselleria de Sanitat la utilización de ese edificio para habilitar el centro de salud después de que quedara vacío.«Cuando los responsables de sanidad lo vieron dijeron que era magnífico», indicaba.

Tanto Lola como Jesús, otros dos vecinos que han sido de los primeros en recorrer los pasillos y las salas del nuevo edificio se han mostrado «muy contentos», señalando, además que «ya era hora», refiriéndose a los años que el barrio ha tardado en disponer de este recurso sanitario.

Al finalizar la visita, el presidente, Ximo Puig, recordaba que este centro fue «una promesa en un momento determinado, en el que había una sensación de incumplimientos», en referencia a la etapa del PP en el Consell. Puig aseguraba que el nuevo recurso ofrece «condiciones muy favorables» a los vecinos y vecinas, ya que «se trata de un edificio moderno».

Por su parte, el alcalde, Joan Ribó, recordaba que «en 2012, cuando yo era concejal de la oposición ya pedíamos este centro de salud». A su vez quiso felicitar a la asociación de vecinos «porque si hoy lo tenemos es gracias a su trabajo». La máxima autoridad del consistorio destacaba que este nuevo espacio «dignifica la sanidad del barrio y mejora la sobresaturacion que había en otros.