Los Bomberos del Ayuntamiento de València se manifestaron en València para reclamar una serie de complementos salariales para bomberos y cabos; y el pago de las especialidades de buzo y unidad canina, tras la negativa de la concejala de Personal Lluïsa Notario a atender sus peticiones. En una masiva asamblea celebrada en el hemiciclo municipal, se acordó el martes llevar una serie de movilizaciones.

La primera de estas acciones de protesta es esta manifestación, donde se han visto las pancartas del sindicato SPPLB, que ha partido del parque central de Bomberos hasta el edificio consistorial, desde las 11 de la mañana. Los trabajadores han llegado al ayuntamiento justo cuando se estaba celebrando el pleno y allí han escenificado su malestar ante el alcalde Joan Ribó y el resto del equipo de gobierno.

El Sindicato Profesional de Bomberos ha considerado un éxito la convocatoria, al haber sido respaldada "por cerca del 80% de la plantilla (al estar el resto del colectivo de servicio)" coreándose consignas contra la gestión del ewquipo de gobierno, tanto del alcalde Joan Ribó como del concejal de Bomberos, Aarón Cano, o la concejala de Gestion de Recursos, a esta última bajo el lema "Luisa Notario Incumple a Diario” en una pancarta, en referencia "al incumplimiento sistemático con los acuerdos adquiridos antes del verano y que ahora están negando".

Los acuerdos "se basan fundamentalmente en el reconocimiento del mismo complemento salarial que tiene el resto de funcionarios del Ayuntamiento según su nivel de estudios (bachillerato y técnico superior para bomberos y cabos) y que Bomberos lleva reivindicando desde el año 2012. Este año por fin se acordó la equiparación que ahora la Concejala niega". Otro es "el reconocimiento de las especialidades de buceadores y guías caninos, con una gran repercusión en el puerto y rescate de personas desaparecidas y que ahora el Ayuntamiento les escatima así como el de los cabos de bomberos que desde que se aprobó la ley de bomberos en el 2011 están cobrando sus retribuciones como antes de la Ley, cuando en esta Ley les subieron el nivel de exigencia y responsabilidad y después de casi diez años y conseguido el acuerdo en febrero ahora le Ayuntamiento también escatima".

Reclaman pues, en alusión a la concejala, que "cumpla su palabra y nos les vuelva a dejar tirados", no descartando la posiibilidad de "aumentar las medidas de presión en las fechas venideras".