El Consejo de Administración de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de València ha aprobado adjudicar un contrato de más de 10 millones para desarrollar y llevar a cabo una plataforma tecnológica que permitirá interconectar a los usuarios de transporte de València con Valladolid, Vitoria, Logroño, Fuenlabrada y Gijón. Esta iniciativa que se ha puesto en marcha por la vía urgente, ya que ha recibido una lluvia de millones de Europa por la vía de los Next Generation, permitirá a un valenciano gestionar qué medios de transporte va a utilizar cuando visite esas ciudades.

Este proyecto multiciudad -tal como informó la EMT en una nota de prensa- permitirá a la ciudadanía "planificar, reservar, pagar y viajar en distintos medios de transporte sostenibles, como autobús, bicicleta de alquiler o taxi, usando una misma aplicación en todas las ciudades que se integren en la plataforma". De esta forma, una única aplicación ofrecerá "una solución de movilidad inclusiva para facilitar la intermodalidad" entre estas ciudades "sin necesidad de depender del vehículo privado y seguir fomentando la movilidad sostenible".

Por ejemplo, una vez registrado en la plataforma y asociado un medio de pago, si un valenciano visita Valladolid podrá autorizar su vehículo para acceder a la ZBE (Zona de Bajas Emisiones), comprobar el estado del tráfico, coger un autobús gestionado por la compañía municipal de transporte (Auvasa) o alquilar una bicicleta del sistema público.

Esta plataforma tecnológica también sirve para las personas que se mueven por València. Una persona usuaria de la ciudad podrá planificar, reservar, pagar y viajar en diferentes medios de transporte sostenibles (autobús, bicicleta de alquiler, taxi, etc.) utilizando una única aplicación.

Esta iniciativa, denominada “Ciudades Conectadas”, será costeada con los fondos Next Generation hasta un 90%, y está previsto que esté en marcha en 2024, en junio si está ejecutada, tal como se anunció en la presentación realizada en Valladolid hace unos meses. De momento, solo se han unido a esta plataforma estas ciudades citadas, que suman 2 millones de habitantes, sin embargo en un futuro podrán sumarse otras capitales españolas pues "se desarrollará en código abierto".

Nuevos autobuses de la EMT, que se han sido comprados recientemente. Jorge Gil

Asimismo, según fuentes de la EMT, subrayan que también permitirá la captación, procesamiento y explotación de datos de movilidad urbana. Por primera vez, serán los ayuntamientos quienes gestionen directamente el Big Data de la movilidad para conocer al detalle los nuevos hábitos de movilidad y tomar mejores decisiones a la hora de planificar el transporte de las ciudades. Por ejemplo, "se podrá estudiar el impacto de la creación de una nueva línea o la ampliación de un recorrido a la ciudad, teniendo en cuenta otros factores como los niveles de contaminación o el aumento de la seguridad", añaden estas fuentes.

Pese a las múltiples opciones de interconectividad que ofrece esta herramienta tecnológica, por el momento no se han sumado al proyecto las grandes capitales -como Barcelona o Madrid- con las que València mantiene relaciones empresariales, comerciales y turísticas a diario, u otras ciudades como Bilbao, Sevilla o Málaga, mucho más pobladas, que atraen más valencianos por negocios y ocio.

Sí están Fuenlabrada, ciudad madrileña cercana a la capital de España, o Vitoria-Gasteiz, ciudad vasca modelo en implantar polìticas medioambientales pioneras que le valieron ser Capital Verde Europea en 2012. Se da la circunstancia que la actual gerente de la EMT, Marta Serrano, fue directora de operaciones de la compañía municipal de autobuses de Fuenlabrada, antes de ser fichada por el presidente de la EMT Giuseppe Grezzi para la compañía valenciana. Además, Marta Serrano copreside con la gerente de Transportes Urbanos de Vitoria (TUVISA), Marijo Ajuriaguerra, la primera Comisión de Movilidad y Género de la Asociación de Transportes Públicos Urbanos y Metropolitanos (ATUC).

Cuando se presentó la iniciativa en Valladolid, al alcalde Óscar Puente se le preguntó por qué Valladolid se ha unido con estas ciudades y no con otras más cercanas, Puente precisó que “el criterio de proximidad no es el que ha imperado” y que con estas cinco ciudades mantiene redes de “colaboración” y experiencia en movilidad y otras políticas y materias comunes.

En el caso de València, tampoco ha primado el criterio de proximidad -por ejemplo, no se ha hecho con Castelló ni Alicante o Elx-, o como hemos referido, con las grandes capitales de España, tanto desde el punto de vista poblacional como económico, con los que hay flujos de movilidad más intensos de ida y vuelta.

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Tras adjudicar este nuevo contrato, la EMT de València ha adjudicado ya 40 millones de euros de los proyectos financiados por la Unión Europea-Next GenerationEU "para digitalizar el transporte urbano y avanzar en la descarbonización de la ciudad". Entre estos proyectos estratégicos se encuentra, por ejemplo, "la compra de una veintena de autobuses eléctricos cero emisiones o la instalación de la nueva infraestructura a bordo de los vehículos para incorporar el pago con tarjeta bancaria o con el móvil", han enfatizado fuentes de la empresa municipal.

El presidente de la sociedad Giuseppe Grezzi ha destacado el nivel de adjudicación de todos los proyectos Next Generation, "que demuestra la gran capacidad de gestión y el proyecto que tiene la EMT" para impulsar la innovación y dar mejor servicio a la ciudadanía”. Algunos de estos proyectos ya están en marcha, ha recordado, "como la renovación de todas las marquesinas para conseguir la accesibilidad universal, mientras que otros permitirán introducir muy pronto mejoras en el servicio para continuar potenciando una movilidad más sostenible y eficiente".