El grupo de migrantes que malviven en la vieja fábrica de Benimaclet han pedido ser traslados a viviendas sociales cuando se lleve a cabo el desalojo de la finca en ruinas donde están alojados. Esto significa que no aceptan la oferta del Ayuntamiento de València de ser trasladados a un albergue municipal en el que iban a ser ubicados los 27 temporeros africanos -la mayor parte ghaneses- y con unos horarios flexibles adecuados a sus peticiones.

Al cierre de esta edición se ha celebrado una reunión en el Centro Municipal de Servicios Sociales de Benimaclet a la que han acudido una quincena de los temporeros afectados, junto a representantes de ONG africanas que les prestan apoyo, el equipo de técnicos municipales de Servicios Sociales y componentes de la Asociación de Vecinos del barrio.

Entre todos, se había avanzado para consensuar las condiciones que contentaban a ambas partes y que iban a permitir desalojar la fábrica en ruinas, en los próximos días. Sin embargo, cuando ya todo parecía cerrado y que los migrantes iban a ser llevados a un albergue municipal, los temporeros han cambiado de opinión y han pedido ser realojados en pisos.

Esto, según fuentes municipales, deja la solución de este problema en manos de la Generalitat, que es la que dispone de viviendas sociales para inmigrantes, y traslada el realojo de estas personas fuera del término municipal de València. En concreto, a La Coma, barrio de Paterna, y a Sagunt, donde existen viviendas que podrían acoger a estos temporeros africanos.

Fuentes de la concejalía de Servicios Sociales han lamentado que no se haya podido cerrar un acuerdo y han señalado que el ayuntamiento "ha hecho todos los esfuerzos posibles" para habilitar un espacio adecuado a las necesidades de estas personas. Ahora se deberá convocar otra reunión el 15 de diciembre, en la que deberá estar también representada la Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo (EVHA), dependiente de la Generalitat Valenciana, para aportar los recursos habitacionales donde serán realojados los migrantes.

Durante la reunión celebrada en el centro municipal de servicios sociales de Benimaclet, los sintechos afectados -que trabajan en el campo, chatarreros y aparcacoches- han trasladado su temor a los trabajadores sociales y a los componentes de las ONG de que si son llevados a un albergue, no podrán tener los horarios flexibles de entrada y salida que precisan. Además, algunos también piensan que la administración va a deportarlos porque muchos carecen de documentación. Todo el grupo, asimismo, ha pedido ser alojado en conjunto en un mismo recurso habitacional.

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Los técnicos municipales del Ayuntamiento de València, por su parte, les han confirmado que no serán deportados de ninguna manera y que en el albergue que se les ha ofrecido podrán tener unos horarios adaptados a sus necesidades. Igualmente, se procederá al traslado conjunto de los 27 migrantes censados en esta vieja fabrica, tal como solicitan los afectados. Con todo, todas estas soluciones aportadas por el consistorio no se aplicarán de momento ya que finalmente no han sido aceptadas.

Por su parte, la Asociación de Vecinos de Benimaclet antes del encuentro efectuado en el centro municipal, había valorado "positivamente" que el ayuntamiento haya dado el paso para alojar a estas personas en un espacio adecuado a sus necesidades. Sin embargo, la entidad vecinal había denunciado que estos seres humanos quieren un trabajo digno en una vivienda digna que no pueden conseguir, a menudo, por la discriminación, la explotación laboral y el racismo que sufren.